ABSTRACT
Se estudia la historia clínica de un paciente adulto en quien se practicó la derivación ventrículo-peritoneal a los 15 años de edad, por la hidrocefalia que tenía. Posteriormente presentó un quiste peritoneal, que contenía líquido céfalorraquídeo, cuando tenía 18 años. El quiste peritoneal de LCR es una complicación poco frecuente en la población pediátrica y es muy rara en la población adulta, como sucedió en el paciente que estudiamos
Subject(s)
Adolescent , Humans , Male , Cysts/ethnology , Cerebrospinal Fluid Shunts/adverse effects , Peritoneal Diseases/ethnology , Peritoneal Cavity , Hydrocephalus/therapyABSTRACT
Se informa el resultado del tratamiento médico-quirúrgico en dos pacientes que sufrían de neurocisticercosis y son, según creemos, los dos primeros confirmados en Panamá. El primer caso fue hospitalizado en el Santo Tomás y tratado quirúrgicamente (Se le practicó la derivación ventrículo-atrial; y, después, la extirpación de un quiste que estaba localizado en el cuarto ventrículo y obstruía la circulación del líquido cefalorraquídeo). El examen histopatológico del quiste extirpado reveló que era un cisticerco degenerado. El segundo caso fue internado en el Hospital del Niño y tratado medicamente (Se usó Prazicuantel, por vía bucal, en dosis de 50 mg/Kg de peso corporal por día, en tres tomas, con cada comida, durante 15 días; y Decadrón, en dosis de 0.5 mg/Kg de peso corporal, por día, durante 18 días). El resultado del tratamiento fué excelente, en ambos pacientes, porque curaron del síndrome clínico que presentaban
Subject(s)
Child , Adult , Humans , Male , Cysticercosis , Brain Diseases , Panama , Seizures , Cysticercosis/surgery , Cysticercosis/complications , Cysticercosis/epidemiology , Brain Diseases/surgery , Brain Diseases/complications , Brain Diseases/epidemiologyABSTRACT
El estudio del monitoreo de la presión intracraneal con el sensor epidural demostró, en pacientes que sufrieron de traumatismo craneal y estaban inconscientes o que tenían tumoraciones intracraneales, que es de fácil aplicación, que es menor el riesgo de infección que con otras técnicas, y que es nula la posibilidad de obstrucción por edema cerebral o detritos. La determinación de la presión intracraneal es de gran ayuda en el tratamiento urgente de los pacientes con hipertensión intracraneal, que no son casos quirúrgicos; y en los casos quirúrgicos (cuando la lesión ocupa espacio), es una buena guía en el tratamiento preoperatorio y el uso racional de los diuréticos osmóticos