ABSTRACT
Los anticonvulsivantes, corno la carbamacepina y el valproato sódico, se han utilizado desde hace décadas para el tratamiento de diferentes patologías psiquiátricas; especialmente en los trastornos afectivos y en los trastornos de personalidad. Recientemente se han comercializado nuevos antiepilépticos como la oxcarbacepína, el topiramato, la lamotrigina o la gabapentina. El presente artículo revisa las propiedades farmacocinéticas y farmacodinámicas de estos productos; los principales estudios publicados sobre su efectividad en el manejo del trastorno bipolar y trastorno del control de los impulsos, con resultados prometedores, aunque todavía en muestras muy pequeñas; sus probables indicaciones terapéuticas, y sus efectos adversos más comunes