ABSTRACT
El objetivo fue evaluar si los pacientes admitidos en la Unidad de Cuidados intermedios pediátricos (CIPED) reunieron los criterios de admisión a la misma, cumplieron con criterios de alta complejidad definidos ad-hoc y pudieron ser incluidos dentro de los "centros de referencia nacional" del plan estratégico del Hospital. Como también identificar las barreras que impidieron la contrarreferencia de estos pacientes y cuantificar la necesidad de anestesista pediátrico como único criterio de asistencia al HEC. Se concluye que la mayoría de los pacientes internados en CIPED cumplieron con los criterios de admisión y de alta complejidad. Debido al alto porcentaje de pacientes no contrarreferidos al segundo nivel de atención, trabajar desde la gestión en la integración del intercambio asistencial entre el tercer y primer nivel de atención resultará determinante para una adecuada continuidad asistencial.