ABSTRACT
Información proveniente de comunidades desarrolladas sugiere que el hierro en la leche humana es de alta biodisponibilidad y que los lactantes de término alimentados con el pecho están protegidos de la deficiencia de hierro durante los primeros 6 meses de vida. Se estudió el estado de nutrición de hierro de lactantes de término, sanos de 4, 6 y 9 meses de edad (n=68, 74 y 61 sujetos respectivamente) de bajo nivel socioeconómico, provenientes de áreas urbanas de Santiago, alimentados con leche materna como única fuente láctea (LM), comparándolos con 2 grupos de lactantes destetados antes de los 3 meses de edad, que recibieron, respectivamente, leche fortificada con hierro (LF) y leche no fortificada (LP). A los 4 meses, el grupo LM presentaba mejor nutrición de hierro, mostrando diferencias significativas con ambos grupos controles en la saturación de la transferrina 18,1+-9,9 vs 11,4+-4,3 y 12,0+-4,5) y en la protoporfirina eritrocitaria libre (80+-29 vs 90+-29 y 108+-33). Los promedios geométricos de ferritina sérica en los grupos LM y LF fueron significativamente mayores (p<0,001) que en el grupo LP (46,9 y 49,1 vs 25,0). A los 6 y 9 meses de edad el grupo LM no difería del grupo LP en ninguno de los parámetros medidos, mostrando ambos valores que indican deterioro del estado nutricional de hierro, al ser comparado con el grupo LF. A la edad de 9 meses, 30 y 29% de los lactantes de los grupos LM y LP, respectivamente, tenían anemia (hemoglobina 11 g/dl) vs 7% en el grupo LF. Los resultados sugieren que los lactantes chilenos alimentados con pecho pueden presentar signos de deficiencia de hierro a los 6 meses de vida. La suplementación con hierro debe ser considerada, por ende, en los lactantes alimentados en forma natural después de los 4 o 6 meses de edad