ABSTRACT
El trauma renal corresponde a un 10% de todos los traumas abdominales; de ellos, un 90% comprende el trauma cerrado. Con respecto a las intervenciones asociadas, el manejo secuencial conservador o «paso a paso¼ ha logrado disminuir las tasas de nefrectomía innecesarias, ubicándose en un 28% en la actualidad. Una de las herramientas disponibles en la actualidad como parte del tratamiento del paciente con trauma renal cerrado de alto grado es la angioembolización. Consecuentemente, vale la pena conocer cuáles son los factores predictores para realizar una intervención temprana con fines de detener el sangrado, las tasas de éxito de la primera o segunda angioembolización y los predictores de falla.
Renal trauma accounts for 10% of all abdominal traumas; of these, 90% comprise blunt trauma. With respect to associated interventions, sequential conservative or "step-by-step" management has managed to reduce unnecessary nephrectomy rates, currently standing at 28%. One of the tools currently available as part of the treatment of patients with high-grade blunt renal trauma is angioembolization. 2 Consequently, it is worth knowing the predictors of early intervention to stop bleeding, the success rates of the first or second angioembolization and the predictors of failure.