ABSTRACT
Se practicó una encuesta en 3021 empleados del Gobierno Federal, mediante un cuestionario autoaplicado en el que se recabaron datos socioeconómicos de los encuestados (sexo, edad, estado civil, número de hijos, religión, escolaridad e ingresos mensuales), y preguntas en relación a la eutanasia. Para fines de este trabajo se consideraron tres tipos de eutanasia: 1) pasiva (suspensión de los medios que mantienen vivo a un paciente); 2) activa (aplicación de medios que provocan la muerte inmediata de personas con sufrimiento sin probabilidades de alivio); y 3) activa a mediano plazo (aplicación de sustancias que mantienen sedado y sin molestias a un paciente, con suspensión de su alimentación). La eutanasia pasiva y la eutanasia activa a mediano plazo fue admitida por 40 por ciento de la población, y la eutanasia activa por 20 por ciento. Estos porcentajes se elevan en los jóvenes; en los que no profesan ninguna religión o en quienes la religión no influye ostensiblemente; en los profesionales y en los posgraduados