ABSTRACT
Antecedentes. El CA 19-9 se utiliza para diagnóstico de neoplasias gastrointestinales, principalmente pancreatobiliares. En colestasis se han descrito resultados falsos positivos. Objetivo. Establecer la utilidad clínica del CA 19-9 en el diagnóstico de cáncer pancreático y hepatobiliar en enfermos con y sin colestasis. Métodos. Se revisaron 548 expedientes de pacientes con determinación sérica de CA 19-9 realizada entre mayo-1996 y junio-1998. Los casos se agruparon por diagnóstico de egreso; la malignidad se estableció por histología o características clínicas y radiológicas. Se utilizaron curvas ROC para calcular el punto de corte ideal (PCI). Se definió colestasis como la elevación de bilirrubinemia por encima de 3 mg/dL. Resultados. El 30 por ciento de las determinaciones correspondieron a pacientes con enfermedad benigna no pancreato-hepatobiliar (1.3 por ciento con resultados =100 U/ml). El CA 19-9 fue mayor en enfermedades malignas, tanto pancreáticas como hepatobiliares que en benignas de los mismos órganos; así como en cáncer de páncreas comparado con cáncer hepatobiliar. El PCI para diferenciar las enfermedades pancreato-hepatobiliares malignas fue cercano a 100 U/ml, demostrando mayor especificidad con respecto al punto de corte habitual (37 U/ml). La colestasis se asoció con elevación del antígeno tanto en enfermedades malignas como benignas y modificó la eficacia de la prueba al incrementar la sensibilidad a expensas de reducir la especificidad. El PCI para identificar tumores pancreáticos resecables fue de 224 U/ml. Conclusiones. El CA19-9 es útil para diagnosticar enfermedad maligna pancreato-hepatobiliar. La colestasis modifica las características operacionales de la prueba por lo que debe utilizarse un punto de corte adecuado al entorno clínico de cada paciente que permita mantener su utilidad.