ABSTRACT
El ión hidrógeno tiene la propiedad de interactuar de manera rápida con diferentes moléculas en el organismo, así como enzimas, receptores y la participación en reacciones bioquímicas y es el mismo organismo el encargado de regular su concentración en los diferentes compartimentos del cuerpo. Y es donde los trabajos desarrollados por Stewart han demostrado que la homeostasis del ión hidrógeno en los trastornos acido base no depende de si mismo y/o del intercambio con bicarbonato para tamponar el déficit o el exceso, sino que lo convierte en una variable dependiente de otros factores para su regulación en cada uno de los compartimentos, dándole importante validez a la presencia de acidos débiles, manteniendo la influencia del CO2 y resaltando la capacidad de los iones fuertes como principales determinantes en la concentración de H+ y de esta manera explica la causa en las variaciones del pH en el ser humano.