ABSTRACT
Este trabajo describe dos etapas en el tratamiento de los tumores primitivos y secundarios del hígado llevadas por vía angiográfica o sea: embolización de la arteria hepática entre 1978 y 1988, y quimioterapia intraarterial desde 1988 hasta la fecha. El primer procedimiento se aplicó en 23 pacientes a los cuales hay que agregar 2 más realizados recientemente en portadores de metastasis hepáticas de tumores carcinoides, ( angiomas cavernosos n=8, hepatomas n=4, metastásicos: vesícula n=1, mesonefroma n=1, carcinoides n=2, colon n=6). Fallecieron 2 pacientes, en el resto se registraron sobrevidas de 4 a 18 meses con buena calidad de vida. En 3 enfermos se intentó la reembolización sin mayor éxito ya que la arteria hepática original no ingresaba al tumor el cual se irrigaba por vías colaterales complejas. Frente a esta limitación y con la disponibilidad de nuevas drogas quimioterápicas nos inclinamos por su administración por vía arterial angiográfica con ingresos repetidos cada 30 días promedio por arteria hepática o tronco celíaco. El número de pacientes ingresados es de 22 (hepatomas n=3, colangiocarcinoma n=1, metatásicos 18: ovario n=1, mama n=1, colon n=9, melanoma n=1, páncreas n=2, vesícula n=3, carcinoide n=1). Se aplicó técnica de Seldinge y Odman y se utilizaron esquemas poliquimioterápicos con antraciclinas, cisplatino, mitimicina en combinación de cada una de ellas con 5FU modulado con leucovorina en cursos de 1 hora para cada droga mientras en paralelo se agregaban bolos de 5ugr. promedio de adrenalina cada 3 minutos. Los cursos fueron repetidos entre 1 y 17 veces. La sobrevida comprende entre 3 y 36 meses. La quimioterapia intraarterial en nuestra experiencia es un método factible, con buena tolerancia local y general, con escasa complicación, siendo bien aceptada por los pacientes