ABSTRACT
La convocatoria que hizo este año el Ministerio de Educación, a través del Fondo Competitivo del Programa de Mejoramiento de la Calidad de la Educación Superior (MCESUP), para un concurso especial de proyectos en apoyo en la renovación curricular de pregrado, estableció entre otras condiciones, un rediseño curricular basado en competencias. En este artículo expongo algunos elementos de juicio que nos permitan comprender el significado de un enfoque curricular por competencias tiene en la formación de profesionales universitarios. Entre ellos, por ejemplo, cómo surge este modelo, a qué concepciones responde en sus inicios y cómo su evolución va incorporando aspectos sociales, contextuales y valóricos, pretendiendo hacerlo compatible con la esencia del "ser universitario" y de la "formación universitaria". Cómo, sin embargo, y desde mi perspectiva, estos nuevos alcances al modelo no hacen sino distorsionarlo a tal punto, que lo hacen perder su consistencia lógica interna. Por otra parte, su aplicación cómo único enfoque orientador del currículo en el ámbito universitario, nos hace vislumbrar consecuencias que irían en desmedro de la formación universitaria actual de los profesionales del país.
The convocation done this year by the Ministry of Education, through the Competitive Funds of the Program of Improvement of the Quality of Superior Education (MECESUP), for special aid of projects in support to the curricular renovation of pre-degree, established among other conditions, of curricular redesign based on competences. In this article I expose some elements of judgment that allow us to understand the meaning that a curriculum based on competences has in the formation of university professionals. Among them, for example, how this model arises, to what conceptions responds in its beginnings and how its evolution is incorporating social, contextual and valuable aspects, trying to make it compatible with the essence of the "universitary being" and the "universitary formation". How, nevertheless, and from my perspective, these new findings to the model do not make but distort it to such point, that they make it lose its internal logical consistency. On other hand, its application as the only orientation of the curricular process in the university, makes us glimpse consequences that would go in decline of the present universitary formation of the professional of the country.