ABSTRACT
A pesar de que es aparente que los seres humanos, las sociedades y los países son diferentes entre sí, investigadores, planificadores y políticos tienden a ignorar las diferencias y pretender que la diversidad puede puede ignorarse, darles un valor o un nombre y crear grupos de conveniencia. La revisión de tendencias de causas de muerte en el mundo y en Colombia indica lo obvio. La morbimortalidad de los países del tercer mundo no es exclusivamente infecciosa ni la del primer mundo cardiovascular. Existen diferencias claras entre y dentro de países del primer mundo con características de salud de tercer mundo y viceversa. Se hace necesario ignorar los prejuicios e identificar los problemas de cada lugar, sus factores para desarrollar programas adecuados para el contexto del lugar. Debe evitarse caer en el pensamiento simplista de que somos tercermundistas y por lo tanto nuestros problemas son iguales con los otros países clasificados como tales