ABSTRACT
The mycorrhizal component of revegetated areas after ecological restoration or rehabilitation in arid and semiarid tropical areas has been scarcely assessed, particularly those made after mining disturbance. We evaluated and compared the presence of arbuscular mycorrhizal fungi of a small area of restored tropical dry for est destroyed by sand extraction, with a non-restored area of similar age, at the peninsula of Macanao, Margarita Island (Venezuela). Our study was undertaken in 2009, four years after planting, and the mycorrhizal status was evaluated in four restored plots (8 x 12.5 m) (two were previously treated with hydrogel (R2 and R2'), and two were left untreated (R1 and R1'), and four non-restored plots of similar size (NR1 and NR1' with graminoid physiognomy with some scattered shrubs; and NR2 and NR2', with a more species rich plant community). Apparently the restoration management promoted higher arbuscular mycorrhizal fungi (AMF) species richness and diversity, particularly in restored soils where the hydrogel was added (R2 treatment). Soil of the NR1 treat ment (with a higher herbaceous component) showed the highest spore density, compared to samples of soils under the other treatments. Considering species composition, Claroideoglomus etunicatumand Rhizophagus intraradiceswere found in all treatments; besides, Diversispora spurcaand Funneliformis geosporumwere only found in non-restored plots, while members of the Gigasporaceae (a family associated with little disturbed sites) were commonly observed in the plots with restored soils. Mycorrhizal colonization was similar in the restored and non-restored areas, being a less sensitive indicator of the ecosystem recovery. The trend of higher richness and diversity of AMF in the restored plot with hydrogel suggests that this management strategy contributes to accelerate the natural regeneration in those ecosystems where water plays an essential role.
Pocos estudios han evaluado el estado mico-rrízico de áreas tropicales áridas y semi-áridas sujetas a restauración o rehabilitación, en particular después de actividades de minería. Evaluamos y comparamos la presencia de hongos micorrízicos arbusculares en una pequeña área de un bosque seco restaurado que había sido destruido por la extracción de arena, con un área no res taurada de edad similar en la península de Macanao, Isla de Margarita (Venezuela). En Mayo 2005 fueron plantadas cinco especies de árboles nativos (Tecoma stans, Bulnesia arborea, Piscidia carthagenensis, Prosopis julifloraand Parkinsonia praecox)en las áreas deforestadas, con la aplicación de hidrogel como tratamiento más exitoso en términos de sobrevivencia y crecimiento de las plantas. En el presente estudio fue evaluado el estatus micorrízico de cuatro parcelas restauradas (8 x 12.5 m) y cuatro par celas no restauradas de edad similar. Dos de las parcelas restauradas habían sido tratadas previamente con hidrogel (R2 y R2') y a las otras dos no se les agregó hidrogel (R1 y R1'). Las parcelas no restauradas (NR1 y NR1') tenían una fisonomía graminoide con algunos arbustos dispersos, mientras que las otras dos parcelas (NR2 y NR2') mostra ron una comunidad de plantas más diversa. Los resultados indican que aparentemente la restauración promueve una mayor riqueza y diversidad de hongos micorrízicos arbus culares (HMA), particularmente en los suelos restaurados donde fue empleado un hidrogel (tratamiento R2). El suelo del tratamiento NR1 (con un alto componente herbáceo) presentó la mayor densidad de esporas comparado con los suelos de los otros tres tratamientos, lo cual es consistente con los resultados de otros estudios donde las condiciones ambientales estresantes (alta temperatura e intensidad lumínica) promueven una mayor esporulación de HMA. La composición de especies de HMA difirió entre suelos no restaurados y restaurados. Clareidoglomus etunicatumy Rhizophagus intraradicesfueron encontrados en todos los tratamientos, Diversispora spurcay Funneliformis geosporumfueron encontrados sólo en las parcelas no restauradas, mientras que especies pertenecientes a la familia Gigasporaceae, una familia que está asociada con sitios poco alterados, fue observada en mayor proporción en los suelos de las parcelas restauradas. La colonización micorrízica fue similar en las áreas restauradas y no restau radas, y es un indicador menos sensible de la recuperación del ecosistema. La mayor riqueza y diversidad de los HMA en las parcelas restauradas con el hidrogel, sugiere que esta estrategia de manejo podría contribuir con la aceleración de la regeneración natural en un ecosistema donde el agua juega un papel esencial.