Your browser doesn't support javascript.
loading
Show: 20 | 50 | 100
Results 1 - 3 de 3
Filter
Add filters








Language
Year range
1.
Article in Spanish | LILACS-Express | LILACS | ID: biblio-1535970

ABSTRACT

Contexto: la deficiencia de hierro es un trastorno frecuentemente observado en pacientes con enfermedad renal crónica (ERC), sobre todo en estadios avanzados. Su presencia se asocia a una mayor morbilidad y mortalidad. La deficiencia de hierro puede ser absoluta o funcional. La deficiencia absoluta se refiere a una ausencia o una reducción de las reservas de hierro, mientras que la deficiencia funcional se define por la presencia de depósitos de hierro adecuados pero con una disponibilidad insuficiente de hierro para su incorporación en los precursores eritroides. Varios factores de riesgo contribuyen a la deficiencia absoluta y funcional de hierro en ERC, incluyendo pérdidas hemáticas, absorción alterada de hierro e inflamación crónica. Objetivo: con esta revisión narrativa se pretende presentar las definiciones, los aspectos fisiopatológicos, los criterios diagnósticos y las medidas terapéuticas en el paciente con diagnóstico de ERC con deficiencia de hierro. Metodología: se realizó una revisión no sistemática de la literatura en la base de datos PubMed, incluyendo además las guías internacionales más utilizadas que abordan el tema de deficiencia de hierro en ERC. Resultados: se incluyeron un total de 30 referencias bibliográficas. La deficiencia de hierro puede ser absoluta o relativa y el déficit absoluto de hierro se produce con valores de ferritina 100 mcg/l, pero con una TSAT < 20 %. El tratamiento del déficit absoluto consta de reposición de hierro oral o endovenoso y en pacientes que aún no reciben diálisis, se puede hacer una prueba terapéutica con hierro oral, de no haber respuesta se optará por hierro endovenoso, mientras que en pacientes que sí reciben diálisis, la medida ideal es el hierro endovenoso, preferiblemente en preparaciones que permitan esquemas de altas dosis y bajas frecuencias de administración. Las metas propuestas por las distintas guías presentan variaciones entre 500 y 700 mcg/l de ferritina. Conclusiones: el déficit de hierro debe buscarse activamente en pacientes con ERC, ya que su presencia y la falta de intervención conlleva a un incremento en los desenlaces adversos. La terapia con hierro es el pilar del tratamiento y la elección del agente a utilizar dependerá de las características individuales del paciente y de la disponibilidad de las preparaciones de hierro oral o endovenoso.


Background: Iron deficiency is a disorder frequently observed in patients with chronic kidney disease (CKD), especially in advanced stages. Its presence is associated with increased morbidity and mortality. Iron deficiency can be absolute or functional. Absolute deficiency refers to absent or reduced iron stores, while functional deficiency is defined by the presence of adequate iron stores but insufficient iron availability for incorporation into erythroid precursors. Several risk factors contribute to absolute and functional iron deficiency in CKD, including blood fi, impaired iron absorption, and chronic inflammation. Purpose: With this narrative review, it is intended to present the details, pathophysiological aspects, diagnostic criteria and therapeutic options in patients diagnosed with chronic kidney disease with iron deficiency. Methodology: A non-systematic review of the fi ron ra was carried out, in the PubMed database, also including the most used international guidelines that address the issue fi ron deficiency in chronic kidney disease. Results: A total of 30 bibliographical references were included. Iron deficiency can be absolute or relative. The absolute iron deficiency occurs with ferritin values 100 mcg/l but with a TSAT <20 % Treatment of absolute deficiency consists of oral or intravenous iron replacement. In a patient who is not yet receiving dialysis, a therapeutic trial with oral iron can be done, if there is no response, intravenous iron will be chosen. In patients receiving dialysis, the ideal measure is intravenous iron, preferably in preparations that allow high-dose schemes and low frequencies of administration. The goals proposed by the different guidelines present variations between 500 and 700 mcg/l d ferritin. Conclusions: iron deficiency should be actively sought in patients with CKD, since its presence and lack of intervention leads to an increase in adverse outcomes. Iron therapy is the mainstay of treatment; the choice of the agent to be used depends on the individual characteristics of the patient and the availability of oral or intravenous iron preparations.

2.
Acta méd. colomb ; 36(3): 141-144, jul.-set. 2011. ilus, tab
Article in Spanish | LILACS | ID: lil-635363

ABSTRACT

Las interacciones entre el corazón y el riñón se han convertido en un área de considerable interés, dada la interdependencia de los mismos. Esto motivó la definición y conceptualización del síndrome cardio-renal anémico, que incluye interacciones bidireccionales, donde alteraciones, tanto agudas como crónicas de cualquier órgano, pueden afectar indistintamente la función renal o la ventricular. El tratamiento, involucra el bloqueo del eje renina angiotensina aldosterona y durante una descompensación aguda es válido el soporte dialítico para control de la volemia. La anemia, es multifactorial, se debe tratar de manera oportuna con hierro endovenoso y eritropoyetina recombinante, reduciendo al mínimo el soporte transfusional. El manejo, la definición y el pronóstico del síndrome cardio-renal anémico aún sigue siendo controversial y es un reto para el internista moderno (Acta Med Colomb 2011; 36: 141-144).


The interactions between the heart and the kidney have become an area of considerable interest, given their interdependence. This led to the definition and conceptualization of cardio-renal anemic syndrome, which includes a bidirectional interaction: acute or chronic injuries of any organ indiscriminately affect renal or ventricular function. Treatment involves blocking the rennin-angiotensin-aldosterone axis and, during acute decompensation, dialytic support for volemic control. Anemia is due to multiple causesand must be treated promptly with intravenous iron and recombinant erythropoietin, to minimize the need for transfusions. Management, definition and prognosis of cardio-renal anemic syndrome are still controversial and represent a challenge for the modern internist (Acta Med Colomb 2011; 36: 141-144).

3.
Medicina (B.Aires) ; 71(1): 9-14, ene.-feb. 2011. graf, tab
Article in Spanish | LILACS | ID: lil-633813

ABSTRACT

A pesar del amplio uso del hierro endovenoso en hemodiálisis, resta aún identificar un índice adecuado para optimizar esta terapéutica en el largo plazo. Con ese objetivo, se diseñó un estudio prospectivo de cohorte, de larga duración, que consistió en un período basal (PB) y dos períodos experimentales: PI y PII. Se infundió hierro dextran de bajo peso molecular a 100, 150 y 200 mg/mes, respectivamente, durante 6 meses y al final de cada periodo se determinaron: saturación de transferrina (TSAT), ferritina (FERR), porcentaje de eritrocitos hipocrómicos (HYPO) y contenido de hemoglobina en reticulocitos (HCr). Durante el estudio la albúmina aumentó significativamente, pero la Hgb, la dosis de EPO y la proteína C-reactiva se mantuvieron sin cambios. Los cambios en HYPO y FERR fueron inespecíficos. Sólo TSAT (desde 21.4 ± 6 en PB a 34 ± 7.1% en PII, p = 0.01) y HCr (desde 27.5 ± 1.3 en PB a 29.3 ± 1.7 pg en PII, P = 0.045) respondieron específicamente, pero el porcentaje de aumento de TSAT fue de 65% (IC95% 22), y el de HCr sólo 6% (IC95% 2.3; p = 0.0002). Esta diferencia a favor de TSAT se observó en todos los pacientes. Los resultados sugieren la utilización de 200 mg/FeIV/mes y que, de los índices estudiados, TSAT sería el más adecuado para optimizar el uso a largo plazo del hierro endovenoso en hemodiálisis.


The usefulness of intravenous iron therapy in hemodialysis is evidence-based. However, controversy still arises about the most suitable iron marker to optimize this treatment in the long term. We aimed to determine the most suitable marker with a prospective, cohort study, designed to comprise a basal period (BP) and two consecutive experimental periods (PI, PII). Low molecular weight iron dextran was infused at 100, 150 and 200 mg/month respectively, on a biweekly basis, during 6 months. At the end of each period, the following were determined: transferrin saturation (TSAT), ferritin (FERR), percentage of hypochromic eritrocytes (HYPO) and haemoglobin content in reticulocytes (HCr). During the study, albumin increased significantly, whereas no significant changes in hemoglobin, EPO doses and C-reactive protein were observed. Changes in HYPO and FERR were unspecific. Only TSAT (from 21.4 ± 6 in PB to 34 ± 7.1% in PII, p < 0.01) and HCr (from 27.5 ± 1.3 in PB to 29.3 ± 1.7 pg in PII, P < 0.05 ) responded specifically to changes in Fe doses, but change of TSAT was 65% (CI 95% 22), whereas change of HCr was just 6% (CI 95% 2.3; p = 0.0002). The difference was observed in all patients. Results suggest that 200 mg/FeIV/month is effective and that, of the markers tested in this study, TSAT would be the most suitable one to the practicing nephrologist to optimize intravenous iron in the long term.


Subject(s)
Adolescent , Adult , Aged , Aged, 80 and over , Female , Humans , Male , Middle Aged , Young Adult , Anemia, Iron-Deficiency/drug therapy , Iron-Dextran Complex/administration & dosage , Renal Dialysis/adverse effects , Transferrin/analysis , Anemia, Iron-Deficiency/blood , Biomarkers/blood , Dose-Response Relationship, Drug , Epidemiologic Methods , Hematinics/administration & dosage , Infusions, Intravenous
SELECTION OF CITATIONS
SEARCH DETAIL