ABSTRACT
El trauma de bazo tiene una prevalencia del 6 por ciento de los órganos lesionados durante el trauma abdominal cerrado debido a su localización en la porción superior del abdomen; es el órgano intraabdominal que más se lesiona en este tipo de trauma y en las heridas penetrantes del cuadrante superior izquierdo. Si existe esplenomegalia la ruptura puede ocurrir por traumas mínimos. Iatrogénicamente se puede lesionar en procedimientos como arteriografías, colangiografías, esfinterotomías retrógradas endoscópicas, masajes cardíacos, toracentesis bajas, paracentesis en pacientes con esplenomegalias o con hematoms subcapulares y en cirugías como gastrectomías, colectomías y cirugías pancreáticas. Generalmente, ocurre hemorragia intraabdominal masiva por lo que los síntomas son los asociados a hemorragia intraperitoneal (shock, signos de irritación peritoneal, signo de Kehr's, signo de Ballances). En el hemograma pueden aparecer leucocitosis de 12x10(9)/L y el hematócrito, si la hemorragia es muy profusa, se disminuye después de seis horas. El manejo médico comprende un monitoreo adecuado de las funciones vitales y del volumen urinario horario, control de la hemoglobina y el hematocrito y el reemplazo de líquidos, electrolitos y de sangre; el manejo conservador puede ir desde el sólo manejo médico, embolectomía o manejo quirúrgico como esplenectomía parcial, esplenorragia o colocación de mallas por laparotomía formal o por laparoscopia, lo que cada vez es más aceptado en la mayoría de los centros de trauma