RESUMEN
Este artículo describe un estudio prospectivo a 6 años plazo de 28 mujeres en riesgo para desarrollar un trastorno de la conducta alimentaria detectado desde 1991. Seis años después fueron reencuestadas mediante el Test de Actitudes Alimentarias (TAA-40) y el Inventario de Trastornos Alimentarios (ITA) y evaluadas con una entrevista semiestructurada de seguimiento. Un 39,5 por ciento (n=11) puntuaron nuevamente en el rango patológico del TAA-40, manteniéndose su potencialidad para desarrollar un trastorno anoréctico y/o bulímico. Este grupo presentó diferencias biopsicológicas y conductuales significativas con el grupo no patológico en los ítemes Motivación por la delgadez, Conciencia interoceptiva, Insatisfacción corporal, Bulimia, Desconfianza interpersonal (p< 0,05) y Temor a la madurez (p= 0,05) del ITA. Si bien un 60,5 por ciento dejó de ser potencialmente patológico, el resto presentó una mayor comorbilidad física (72,7 por ciento) y se encontraron dos casos de bulimia nerviosa (18,2 por ciento) y uno de anorexia nerviosa (9,1 por ciento). Se hace necesario mantener en control a esta población que persiste en riesgo para desarrollar un trastorno de la conducta alimentaria y presentar comorbilidad física, la que merece ser controlada y evaluada periódicamente por el equipo de salud. Se enfatiza la prioridad de la prevención primaria mediante la administración del TAA-40 y en particular del ítem Motivación por la delgadez del ITA como los predictores más sensibles y específicos para pronosticar una patología alimemtaria futura