RESUMEN
En un grupo de 31 enfermos con DM tipo II (21 F, 10 M, edad promedio de 48.24 ñ 17.7 años) propuestos para el uso de insulina por fracaso primario o secundario de otras medidas terapéuticas, cuantificamos el nivel basal de péptido C y posterior a un estímulo secretagógo fisiológico como es el alimento ordinario. De sus características generales destacaban el descontrol crónico (Hgb A1C>8//) obesidad (IMC>25 kg/m2), y la duración de la enfermedad (X más de 9 años). De acuerdo al nivel máximo de péptido C se derivaron en tres grupos: A (n=4) considerados como "no respondedores" B (n=7) "respondedores" y C (n-20) "hiperrespondedores". En ningún caso encontramos una pérdida total de la función beta pancreática, e incluso el nivel del péptido C del grupo A, exedía al considerado de riesgo para la presentación de cetoacidosis; quizá este pudiera ser candidato a terapia con insulina. La hiperrespuesta del grupo C es característica de los estados de resistencia a la insulina, por lo que las medidas no farmacológicas como la pérdida de peso y el abandono del sedentarismo deben seguir promoviéndose en todo paciente con DM tipo II, ya que a pesar de la edad y el tiempo de evolución de la enfermedad, una disminución en la reserva insulínica es poco frecuente
Asunto(s)
Humanos , Adulto , Persona de Mediana Edad , Masculino , Femenino , Insulina/administración & dosificación , Insulina/uso terapéutico , Péptido C/análisis , Diabetes Mellitus Tipo 2RESUMEN
Se analizó el nivel de conocimientos sobre reanimación cardiopulmonar que tenian médicos y enfermeras de diferentes hospitales del IMSS en Monterrey, NL, mediante una encuesta basada en los lineamientos internacionales de la Asociación Americana del Corazón. En base al entrenamiento reportado se formaron: Grupo A = con entrenamiento informal, Grupo B = sin entrenamiento, Grupo C = con entrenamiento formal. Dependiendo del nivel académico de los encuestados se formaron siete subgrupos. Las cuatro áreas del cuestionario se evaluaron mediante promedio de aciertos y análisis estadístico. Sobresalió el escaso número de personas con entrenamiento formal y de los que tuvieron acceso informal al aprendizaje, solamente un 30% realizó prácticas en maniquié. Se comprobó un bajo rendimiento en las cuatro áreas investigadas, más notorio en la respiración artificial, tanto en el Grupo A como en el Grupo B. Sin embargo, el Grupo C mostró un 77% de aciertos que al compararse al 64% obtenido por los otros dos grupos resulta en una diferencia estadísticamente significativa (P < 0.001). Se concluye en la necesidad de entrenamiento formal, tanto a nivel médico como de enfermería, para los diferentes técnicas de reanimación cardiopulmonar básica