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Intervalo de año
1.
Rev. chil. cir ; 51(2): 122-9, abr. 1999. tab
Artículo en Español | LILACS | ID: lil-243864

RESUMEN

El trasplante renal constituye hoy en día la mejor alternativa para el tratamiento de la insuficiencia renal terminal. Libera a los pacientes de la diálisis y les mejora significativamente la calidad de vida. Los resultados a largo plazo son mejores con donante vivo relacionado que con riñón de origen cadavérico y el rechazo crónico constituye la principal causa de pérdida de injertos. El Hospital San Juan de Dios efectúa trasplante renal desde la década de los setenta. El objetivo de esta presentación ha sido mostrar los resultados globales del trasplante renal en un período de 20 años y analizar algunas variables particulares y su impacto en la sobrevida del injerto. Se efectuó un análisis retrospectivo desde 1978 a 1997. En este período se efectuaron 133 trasplantes, pero sólo se analizan 115 pacientes con fichas completas e información confiable. La muestra la constituyen 100 adultos y 15 niños, y la principal causa de insuficiencia renal crónica es la glomerulonefritis crónica. El 9,6 por ciento de los injertos se pierde por rechazo crónico. El 70 por ciento de los injertos es de origen cadavérico. Un 69 por ciento de los pacientes presentó al menos un episodio de rechazo agudo. Las variables que mayor influencia tuvieron en la sobrevida a largo y mediano plazo fueron los episodios de rechazo agudo y el retardo de función del injerto. La sobrevida actuarial a 5 años fue de 67,5 por ciento. Nueve pacientes (7,8 por ciento) fallecieron en este período, ninguno por complicación quirúrgica. El 95 por ciento de los riñones cadavéricos trasplantados, han sido procurados por este equipo. La existencia de un equipo médico-quirúrgico afiatado permite ofrecerle a estos pacientes una alternativa terapéutica con buenos resultados


Asunto(s)
Humanos , Masculino , Femenino , Adolescente , Adulto , Persona de Mediana Edad , Insuficiencia Renal Crónica/terapia , Trasplante de Riñón/métodos , Supervivencia sin Enfermedad , Glomerulonefritis/complicaciones , Rechazo de Injerto/etiología , Insuficiencia Renal Crónica/etiología , Estudios Retrospectivos , Donantes de Tejidos/provisión & distribución
2.
Bol. Hosp. San Juan de Dios ; 43(5): 248-56, sept.-oct. 1996. ilus, tab
Artículo en Español | LILACS | ID: lil-185231

RESUMEN

La cuantificación de inmunoglobulinas séricas es el examen más importante en la evaluación de inmunodeficiencias humorales primarias o secundarias. La electroforesis de proteínas séricas (EFPs) da información cualitativa y semicualitativa de la Igs a través de la separación de las proteínas mediante un campo eléctrico. Por la gran variedad de información que aporta, tiene gran utilidad clínica. La relación entre ambos exámenes es más estrecha en medicina interna, en que se recomienda hacer ambas determinaciones. Para estudiar las relaciones que existen entre la determinación específica de niveles de Igs séricas por inmunodifusión radial (IDR) y un examen de screening que engloba a las Igs como la EFPs en soporte de agarosa o acetato de celulosa, se analizó una muestra de 441 pacientes mayores de 10 años que tuvieran determinación de ambos exámenes. Se descartaron los exámenes con componente monoclonal electroforético. Al relacionar los valores de Igs y los de fracción gammaglobulinas mediante el coeficiente de correlación lineal se determinó en todas un valor significativo, que correspondió a 0,7 para IgG, 0,34 para IgM y 0,25 para IgA. Esto corresponde a una buena correlación para IgG y moderada para IgA e IgM. La capacidad predictiva de concentraciones altas y bajas de Igs mediante el nivel de gammaglobulinas se estudió por el odds ratio o razón de probabilidades; la que fue de 32 para IgG baja e hipogammaglobulinemia severa; 7 para IgG baja e hipogammaglobulinemia; 19 para IgG alta e hipergammaglobulinemia; 26 para concentraciones bajas de IgG, A o M e hipogammaglobulinemia severa; 6 para IgA alta e hipergammaglobulinemia y 2 para IgG, A o M bajas e hipogammaglobulinemia. La hipogammaglobulinemia severa demostró ser una prueba de gran específicdad y buena sensibilidad para detectar tanto valores bajos de IgG como disminuciones de algunas de las Igs: G, M o A. Menos específico pero más sensible mostró ser la hipogammaglobulinemia en valores bajos de IgG. Sin embargo, la hipogammaglobulinemia no mostró buena sensibilidad para detectar valores bajos de IgG, A o M; debido principalmente a su poca variación cuando una de estas dos últimas Igs disminuye. La hipergammaglobulinemia mostró buena sensibilidad y específicidad para aumentos policlonales de IgG e IgA


Asunto(s)
Humanos , Masculino , Femenino , Adolescente , Adulto , Persona de Mediana Edad , Electroforesis de las Proteínas Sanguíneas , Inmunoglobulinas/análisis , Agammaglobulinemia/diagnóstico , Hipergammaglobulinemia/diagnóstico , Inmunoglobulinas/sangre , Inmunodifusión/métodos , Valor Predictivo de las Pruebas , Sensibilidad y Especificidad
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