Lesiones cutáneas y cardiopatías congénitas en niños / Cutaneous injuries and congenital heart defects in children

Se realizó un estudio descriptivo de las lesiones cutáneas presentes desde el nacimiento en niños con cardiopatías congénitas que acudieron a la consulta de cardiología infantil de FUNDACARDIN con sede en el Hospital Militar "Dr. Carlos Arvelo", Caracas, a fin de buscar la existencia de alguna asociación cardiocutánea. Se incluyeron 63 niños, obteniéndose que las lesiones cutáneas más frecuentes fueron las maculares (64,70 por ciento) en contraste con un 35,29 por ciento de las otras lesiones agrupadas. Dentro de las maculares, el 59,09 por ciento fueron hiperpigmentadas y 40,90 por ciento hipopigmentadas. De las hiperpigmentadas el 84,61 por ciento correspondió a máculas café con leche y de las hipopigmentadas el 72,22 por ciento fueron nervus despigmentados. Se encontró asociación estadísticamente significativa solo entre las máculas café con leche y la estenosis pulmonar. En conclusión: Las máculas café con leche el estar presentes en un niño orientan a que puede existir una cardiopatía tipo estenosis pulmonar asociada

Onicomicosis / Onychomycosis

En el tratamiento médico para la atención primaria, la educación permanente es uno de los requisitos indispensables de nuestra especialidad, basada en una atención integral y continua al paciente. El médico debe diagnosticar en forma precoz el 99 por ciento de la patología ungueal, la cual puede ser reflejo de enfermedades infecciosas, (micóticas, bacterianas, virales, parasitarias) sistémicas, congénitas, carenciales, neoplásicas, inmunológico, traumáticas o por intoxicaciones. En este trabajo revisaremos la infección ungueal micótica (onicomicosis, candidiasis ungueal, tinea unguis), que es la causa más común de patología infecciosa ungueal. El diagnóstico debe hacerse mediante una historia clínica completa, examen físico de todas las uñas, examen micológico y bacteriológico (infección bacteriana secundaria). La educación y orientación sobre medidas higiénicas, la cooperación del paciente y la prevención de enfermedades ungueales es de vital importancia, principalmente las debidas a causas infecciosas y micóticas, durante las cuales deben mantenerse las uñas libres de humedad y administrar tratamiento de acuerdo con la etiología del proceso. Se han utilizado antimicóticos derivados imidazólicos (ej. Bifonazol) y triazólicos (ej. itraconazol, fluconazol), así como una nueva clase de agentes antifúngicos: las alilaminas (ej. terbinafina), las cuales reducen el período de tratamiento con menos efectos secundarios, por otra parte, existen tratamiento tópicos, entre ellos el bifonazol en combinación con urea, ola ciclopiroxolamina en laca, buenas propiedades de penetración en los estratos de la uña, los cuales por su éxito terapéutico han desplazado los tratamientos convencionales.