RESUMEN
El sangrado perimenopáusico anormal que no cede a la manipulación hormonal, y el sangrado postmenopáusico, son signos de alarma que pueden anunciar patología endometrial orgánica. 285 pacientes con sangrado peri y postmenopáusico fueron sometidas a legrado uterino fraccionado, y estudiadas retrospectivamente correlacionando las manifestaciones clínicas con los hallazgos histopatológicos endometriales. El 28.4% de las pacientes que fueron sometidas a legrado fraccionado (L.F.) presentaron carcinoma de endometrio. El 33.8% de las pacientes que sangraron en la postmenopausia eran portadoras de cáncer de endometrio, y sólo el 12,9% de las pacientes en la perimenopausia. El 26% de las pacientes que refieron sangrado escaso presentaron carcinoma de endometrio. Las pacientes con sagrado de la postmenopausia, nulíparas y con útero aumentado de tamaño, tienen mayor riesgo de presentar carcinoma de endometrio