RESUMEN
El equipo de soporte nutricional es fundamental para poder diagnosticar, evaluar y tratar las deficiencias nutricionales en los enfermos con VIH. Es de destacar que la malnutrición sucede en estos enfermos desde las primeras etapas de la enfermedad, por este motivo, la necesidad de un diagnóstico y de una intervención nutricional precoz se hace imperiosa. Considerando que actualmente no existen soluciones definitivas para esta enfermedad y los efectos secundarios que la farmacoterapia antirretroviral tiene sobre el estado nutricional, hacen que el consejo y el soporte nutricional (farmacológico y no farmacológico) sean armas terapéuticas muy eficaces para contrarrestar efectos no deseados del tratamiento
Asunto(s)
Trastornos Nutricionales , Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida/complicaciones , Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida/dietoterapiaRESUMEN
Antecedentes: hasta el momento, se desconoce la prevalencia de la desnutrición y del riesgo de la desnutrición en los pacientes internados en los hospitales generales de adultos del pais. Sólo existen informes parciales sobre desnutrición en afecciones médicas y en pacientes neoplásicos con y sin metástasis. Objetivos Conocer la prevalencia de la desnutrición y de riesgo de la desnutrición en pacientes internados en un hospital genera] de adultos (Hospital Pasteur, Montevideo, Uruguay) excluidas las áreas de medicina intensiva. 2. Determinar la constancia del diagnóstico nutricional en las historias clínicas de los pacientes. Material y métodos Encuesta sobre el estado nutricional de 179 pacientes internados en áreas médico-quirúrgicas no críticas del hospital, utilizando una Escala de Categorización Mutricional basada en la valoración global subjetiva (VGS) (A = bien nutridos; B = En riesgo de desnutrición; C= Desnutrición moderada; D = Desnutrición severa), cotejando su rendimiento con el índice de masa corporal (IMC) y la auditoría de las historias clínicas de los mismos pacientes, para determinar la constancia del diagnóstico nutricional y de peso-talla en las mismas. Resultados De los 179 pacientes encuestados, y de acuerdo a la escala propuesta, 39 (25 en C; 14 en D) estaban desnutridos (21.5 por ciento) y 37 (21 por ciento) estaban en riesgo de desnutrición (B). El IMC correspondiente a C y D es, de modo muy significativo, menor que el de A (p < 0.001). Sin embargo, A no es significativamente diferente de B, ni C lo es deD. En las 179 historias clínicas auditadas, sólo 24 (13.4 por ciento) tenían constancia del diagnóstico nutricional y ninguna presentó, en forma conjunta, los datos de peso y talla. Conclusiones Existe una alta prevalencia de desnutrición moderada-severa y de riesgo de desnutrición en la población hospitalaria encuestada, según la escala utilizada. Ésta se demostró más adecuada que el IMC per se para la categorización nutricional. Éste último no discrimina entre A y B ni entre C y D. Además, el IMC se altera en presencia de edemas y/o ascitis...