Résumé
Ante los resultados radiológicos dudosos o negativos, frecuentes en la práctica diaria para el diagnóstico de una fractura de huesos propios nasales, se utiliza el buen criterio clínico en el tratamiento de las mismas. Tales dificultades nos llevaron a buscar una nueva indicación como método complementario para lograr una mayor clarificación diagnóstica. En el siguiente trabajo prospectivo se agregó a la tomografía computada bidimensional, la reconstrucción tridimensional facial, logrando en todos los casos estudiados reproducir con exactitud las características anatómicas lesionads, ayudando a mejorar la percepción previa y la identificación del trazo fracturario, pudiendo clasificarlas y mejorar un planeamiento resolutivo de las mismas en tiempo y resultado