RÉSUMÉ
La práctica de la mutilación sexual femenina (MSF), escisión o circuncisión está abundantemente tratada en la literatura por autores de ciencias sociales, profesionales de la salud, la religión, la literatura, activistas de los derechos de la mujer y víctimas de esta práctica de violencia que se ejerce sobre muchas niñas y mujeres africanas. OBJETIVO: identificar los diversos factores que mantienen su realización y la frecuencia con que se presentan consecuencias físicas y secuelas psicológicas. MÉTODOS: se realizó un estudio descriptivo prospectivo longitudinal, de la totalidad de las pacientes que concurrieron al Servicio de Ginecoobstetricia del Hospital Point G Centro Universitario y de nivel III de atención, entre diciembre de 2006 a diciembre de 2007. El universo de trabajo estuvo constituido por las mujeres a las que se les había realizado la escisión y que luego de ser informadas dieron su consentimiento a ser incluidas. RESULTADOS: se encontró una prevalencia de un 90 por ciento de esta práctica en las pacientes estudiadas. El ama de casa, analfabeta, casada y musulmana, predominó en la muestra estudiada. El 60,8 por ciento de las encuestadas ignoran las complicaciones de su realización. En todos los casos encontramos lesión cicatricial. El 89 por ciento de las pacientes reconocieron trastornos psicosexuales. La tradición y la religión fue el motivo esgrimido para la realización a sus hijas con una diferencia significativa (p<0,001). CONCLUSIONES: es una práctica cultural que perpetúa las injusticias sociales y económicas de las mujeres, alejadas de la atención internacional, violando los derechos humanos.
The practice of female sexual mutilation (FSM), excision or circumcision is abundantly treated in literature by social sciences authors, health professionals, religion, women rights activists and the victims of this violent practice carried out on many African girls and women. OBJECTIVE: to identify the different factors involved in this practice, and frequency of physical consequences and psychological sequelae. METHODS: we made a longitudinal, prospective and descriptive study of all patients seen in Gynecology and Obstetrics Service of the Point G Hospital-University Center, and of III level care, from December, 2006 to December, 2007. Sample included the women with excision and after to be informed they gave its consent to inclusion. RESULTS: we found a 90 percent prevalence of this practice in study patients. In study sample there was a predominance of housewives, illiterates, married, and Muslims. The 60,8 percent of polled patients ignore complications of this practice. In all the cases we found a cicatricial lesion. The 89 percent of patients recognized the presence of psychosexual disorders. Tradition and religion were the causes stated for the carrying out of their daughters with a significant difference (p <0,001). CONCLUSIONS: it is a cultural practice perpetuating the social and economic injustices of women, moved away from international attention, violating thus the human rights.