Résumé
El sarampión es una enfermedad viral, altamente contagiosa e inmunoprevenible. Fue eliminada de américa en noviembre de 2002, lo que significa que se hace efectiva la interrupción de la transmisión autóctona del virus del sarampión. Posterior a esta fecha, se han presentado casos aislados importados y brotes asociados a importación, principalmente en Brasil, Venezuela, México, Canadá y USA. Chile interrumpió su transmisión autóctona casi una década antes que en el resto del continente, esto es, posterior a la primera campaña masiva de vacunación (1993). Desde ese entonces se han presentado casos aislados y brotes asociados a importación. Así, el último caso de sarampión se confirmó en 2003 y correspondió a un chileno que viajó a Japón; no produjo casos secundarios. Junto con la primera campaña de vacunación masiva (1992), Chile inicia una vigilancia activa de casos sospechosos de sarampión. En el 2003, esta vigilancia aumenta su sensibilidad, ya que se le integra la vigilancia de rubéola. Como resultado del año 2006, de un total de 326 casos ingresados al sistema de vigilancia integrada, no se confirmaron casos de sarampión o rubéola. Debido al éxito en la eliminación del sarampión en América, las estrategias utilizadas para lograrlo sirvieron de plataforma para establecer una nueva meta de eliminación, esta vez para la rubéola y el síndrome de rubéola congénito (SRC) en el año 2010. Sin embargo, todo el continente americano se mantiene alerta frente al riesgo de importación y de reintroducción del virus de sarampión.