La población de edad avanzada de puerto rico: implicaciones para los servicios de salud / Elderly population of Puerto Rico: implicactions for health services

Este artículo presenta una visión de las principales características sociodemográficas y de salud de los ancianos de Puerto Rico al igual que de suis patrones en la utilización de servicios de salud. Se establecen comparaciones entre varones y hembras. Los ancianos rrepresentan un grupo con escasos recursos económicos, tienen un nivel educativo más bajo y sufren de un mayor número de enfermedades crónicas que el resto de la población. Las mujeres están en desventaja al compararse con los hombres en términos de estas características. Las implicaciones del reto que representan los ancianos para el sistema de prestación de servicios de salud en Puerto Rico son discutidas partienfdo de la realidad de que la mayoría vive en la comunidad y la familia representa su principal fuente de sostén

La segregación por sexo entre las ocupaciones del campo de la salud en Puerto Rico / Sex discrimination in health occupations in Puerto Rico

En Puerto Rico, al igual que en otros países del mundo, existen diferencias notables entre los sexos en cuanto a la ocupación desempeñada, ingresos devengados, escenario de trabajo, nivel de autonomía en el trabajo y funciones adscritas al mismo. Sin embargo, estas diferencias son más notables en las profesiones relacionads al campo de la salud. Esta investigación gira en torno a describir las diferencias que existen por sexo entre grandes grupos ocupacionales del campo de la salud como en ciertas ocupaciones seleccionadas tales como: enfermería y medicina. La fuente principal de información fue el Censo de población de Puerto Rico del año 1980

Condiciones de salud de la población femenina de edad avanzada de Puerto Rico / Health status of the elderly female population in Puerto Rico

Las mujeres de 65 años o más, al igual que otros grupos femeninos de menor edad, registran tasas de mortalidad más bajas que sus cohortes masculinos. Sin embargo, las mujeres ancianas exhiben tasas más altas de morbilidad que los varones. Se mueren más tarde que sus cohortes masculinos pero exhiben tasas más altas de condiciones morbosas. Aproximadamente 7 de cada 10 mujeres de edad avanzada mueren de una enfermedad crónica y la mayoría de ellas padecen cerca de cuatro condiciones morbosas generalmente de tipo crónica. Esto es, mueren y sufren de enfermedades de larga duración que demandan tratamiento médico y uso de medicamentos por largos períodos de tiempo