RESUMO
En células normales y tumorales las poliaminas (Pas) putresina (Pu), espermidina (Spd) y espermina (Spm) son requeridas en múltiples funciones fundamentales del ciclo celular. Altos niveles de Pas han sido reportados en varios tipos de cáncer, por lo que han sido propuestas como biomarcadores del desarrollo tumoral. En el presente trabajo se reporta su utilidad como biomarcadores de la evolución del linfoma murino L5178Y en diferentes fluidos, células y tejidos. Los hallazgos también fueron aplicados al seguimiento del efecto antitumoral de Bursera fagaroides, ya reportado previamente. Se utilizó cromatografía de intercambio iónico para determinar los niveles de Pas en orina, células peritoneales linfocitos circulantes, esplenocitos, mesotelio e hígado de ratones BALB/c a los 10, 17 y 24 días de evolución del tumor y de ratones tratados con el exacto hidroalcohólico de la corteza de B. fagaroides administrado por vía oral o intaperitonealmente (i.p) los niveles urinarios de Spd no fueron detectables, mientras que el incremento de Pu en orina es el mejor biomarcador del crecimiento del linfoma. Además los niveles urinarios de Pu disminuyeron significativamente en ratones tratados intraperitonealmente con B. fagoroides, lo cual refuerza resultados anteriores. En este modelo la variación de los niveles urinarios de Pu es un biomarcador efectivo del desarrollo neoplástico, dado que permite seguir la evolución del linfoma L5178Y. Además, proporciona una herramienta para estudiar in vivo, el efecto antitumoral de B. fagaroides y de otros fármacos.
Assuntos
Animais , Camundongos , Bursera , Linfoma , Biomarcadores , Poliaminas , Biologia , Oncologia , VenezuelaRESUMO
La enfermedad coronaria es la principal causa de mortalidad entre los urémicos en hemodiálisis crónica y determina el pronóstico en los pacientes que reciben trasplante renal, sobre todo tratándose de diabéticos. Presentamos la experiencia con dos diabéticos urémicos en hemodiálisis crónica con lesiones coronarias importantes, en quienes se realizó revascularización miocárdica como preparación para recibir injerto renal de donador vivo relacionado. La evolución en ambos casos, a los 30 y 55 meses respetivamente, confirman el éxito de la operación. Se discute la conveniencia de realizar coronariografía en todos los urémicos de alto riesgo, como son los diabéticos y enfermos de edad avanzada, antes de realizar trasplante renal y el beneficio de la revascularización coronaria en aquellos con lesiones improtantes; se hace una revisión de la literatura y un análisis de la técnica y las dificultades propias de esta operación