RESUMO
El rechazo crónico se ha convertido en la principal causa de disfunción tardía y de pérdida de un aloinjerto. El linfocito B juega un papel amplio en el rechazo crónico de un trasplante y su papel protagónico ha sido enfocado principalmente a la producción de anticuerpos. Sin embargo, es bien conocido que el linfocito B tiene otras funciones importantes que están implicadas en múltiples procesos inmunológicos, pero su rol en el rechazo de los trasplantes no se conoce a profundidad. Estas funciones son: presentación de antígenos y activación de los linfocitos T CD4+; regulación por medio de la producción de citoquinas de las células T, células dendríticas y macrófagos; dirección de la expansión local linfática (linfoangiogénesis) por medio de la producción e factores de crecimiento y quemoquinas. En esta revisión se presenta una visión general de la inmunobiología del trasplante y posteriormente el tema se enfoca en el papel de la célula B en el rechazo crónico de trasplantes, haciendo énfasis en el trasplante renal.