Vía epicárdica-endocárdica en el implante de marcapasos cardíacos / Epicardial-endocardial approach in the pacemakers implants

Algunos pacientes con marcapasos cardíacos para estimulación modo VVI que poseen cables epicárdicos crónicos, estables, con buen sensado de onda r, en un momento dado pueden requerir de un modo de estimulación para restaurar el sincronismo A-V. Otros que necesitan estimulación cardíaca por primera vez con un modo fisiológico podrían tener una malformación que nos dificulten la inserción de cables atriales o ventriculares. Describimos la técnica utilizada por nosotros en cinco oportunidades en cuatro pacientes, en los cuales utilizamos el endocardio de la orejuela derecha conectada al epicardio del ventrículo derecho o izquierdo, su seguimiento y resultados. Las indicaciones fueron: Síndrome de marcapaso en tres casos, bloqueo A-V tercer grado sintomático con atresia tricuspídea en uno y ruptura del cable epicárdico en el paciente de la atresia tricuspídea. Para el abordaje auricular se utilizó en todos la punción subclavia izquierda. Dos pacientes poseían cables ventriculares epicárdicos implantados por abordaje epigástrico y en tres casos se efectuó tocacotomía anterolateral izquierda. El período de seguimiento ha sido de treinta a noventa y ocho meses, durante los cuales el sistema ha funcionado en forma adecuada (Sensado y estimulación normal de un generador conectado al sistema). Pensamos que cuando se encuentra indicado, el método representa una alternativa beneficiosa para el paciente

Acceso venoso permanente mediante el uso del catéter de Hickman: nuestra experiencia / Venous access permanent using Hickman catheter: our experience

El catéter de Hickman ha probado ser un buen instrumento para el acceso venoso permanente en muchos tipos de pacientes. Sin embargo, aunque el procedimiento de implante pudiera ser considerado en la mayoría de los casos "Cirugía Menor", pensamos se debe seguir el consejo "sólo cirujanos calificados en la inserción de catéteres para acceso vascular permante, deben implantarlos". Existen numerosos motivos por los cuales, estos pacientes deben ser tratados diferente. El conocimiento previo de las técnicas de implante por los cirujanos además de su experiencia previa aseguran menores complicaciones que de por sí son suficientes en estos pacientes especiales. Desde hace un año hemos implantado catéteres de Hickman en doce pacientes. Las indicaciones han sido: trasplantes de médula ósea, en cinco; quimioterapia para leucemias, en cuatro; quimioterapia para tumores sólidos, en uno; dificultad de acceso venoso por obesidad extrema en lugar eritematoso que no responde a tratamiento médico y es sometido a plasmaferesis, en uno y nutrición parenteral total deficitiva en uno. Hemos utilizado como vías venosas la vena cefálica en un caso, la subclavia derecha con introductores en otro, la yugular externa por flebotomía en ocho, la yugular interna derecha