RESUMO
Las personas con diabetes presentan en su vida un riesgo de desarrollar úlceras estimado en un 15 a 25 por ciento, las úlceras involucran riesgo de graves complicaciones, situación favorecida por la neuropatía ya sea motora, autonómica y/o sensitiva, el aumento de la presión plantar y el trauma repetido. Una vez que la úlcera se produce, se favorece su mala evolución si hay enfermedad vascular periférica asociada, más alteraciones inmunológicas secundarias a la diabetes y alteraciones del apoyo. Su manejo debe ser realizado por un equipo multidisciplinario dirigido a tratar todos sus componentes tanto locales como sistémicos. Debe optimizarse el control metabólico y la condición general del paciente. Es fundamental la prevención en la población expuesta a través de la educación, indicación de zapatos adecuados, y cuidados podológico.