RESUMO
En este artículo intentaremos reflejar algunas de las tensiones existentes en nuestro campo con relación a la cuestión de género, tomando como eje al trastorno disfórico premenstrual (TDPM). Trataremos de ejemplificar las dificultades que se le presentan a la psiquiatría a la hora de intentar comprender lo que llamamos enfermedad mental y cuáles son sus condicionantes internos y externos en relación a una mirada que contemple la perspectiva de género. Desplegaremos dos aproximaciones diferentes. Primero narraremos la historia oficial del TDPM, la que cuentan las revistas médicas que toman en cuenta una vertiente positivista de evolución del conocimiento científico, que no considera a las cuestiones de género. Luego describiremos una aproximación crítica que no desdeña el modelo médico pero lo complementa con aportes provenientes de las ciencias sociales y así puede dar cuenta del sufrimiento femenino en toda su singularidad y amplitud, como sólo es posible a partir de utilizar la perspectiva de género aplicada a la psiquiatría. No podemos pretender que la mirada desde el género se despliegue completamente en el campo de la psiquiatría cuando en el conjunto de la vida social se registra una gran dificultad para que el concepto de género pueda visualizarse en diferentes áreas de la vida cotidiana.
In this paper we'll try to show some of the tensions existing in our field related to gender issue, focusing on the premenstrual dysphoric disorder (PMDD). We'll try to give some examples of the difficulties Psychiatry has when trying to understand what it is called a mental illness and which are its internal and external determinants from a gender perspective. We will display two different approximations. First of all, the official PMDD story will be narrated, the one told by medical journals, that basing on a positivist side of the scientific knowledge evolution, avoids gender issues. Then we'll describe a critical perspective, which far from denying the medical model it tries to complement it with social sciences contributions, so female suffering can be appreciated in its own singularity and extension. This only can be possible by including gender perspective in Psychiatry practice. We can't expect gender perspective to be fully spread out in the Psychiatry field when in the whole social life there is a big difficulty in visualizing gender concept among the different areas of every day life.