ABSTRACT
A 55-yr-old woman was taken to the hospital after recovering from a presyncopal episode. The electrocardiogram showed sinus bradycardia with QTc interval of 840 msec. Few minutes later, the patient developed a polymorphic ventricular tachycardia and subsequent cardiac arrest requiring cardiopulmonary resuscitation. A week later she presented with severe headache, seizures and decerebrate movements. Cranial computed tomography scan showed subarachnoid hemorrhage with intracranial hypertension requiring decompressive craniectomy. On the follow- up the electrocardiograms always showed prolonged QTc interval, without any new arrhythmic event. The patient's clinical course was unfavorable and required maximum dose of vasoactive drugs. She died 13 days after admission.
Subject(s)
Electrocardiography , Subarachnoid Hemorrhage/complications , Tachycardia, Ventricular/etiology , Tachycardia, Ventricular/physiopathology , Female , Humans , Middle AgedABSTRACT
Mujer de 55 años trasladada al hospital luego de recuperarse de un episodio presincopal. El electrocardiograma mostró bradicardia sinusal con intervalo QT corregido de 840 mseg. Pocos minutos después la paciente presenta episodio de taquicardia ventricular polimórfica y posterior paro cardiorrespiratorio que requirió maniobras de reanimación cardiopulmonar avanzada que fueron efectivas. A la semana presentó cefalea intensa y convulsiones con movimientos de descerebración. La tomografía axial computarizada de cerebro mostró hemorragia subaracnoidea con hipertensión intracraneal que requirió craniectomía descompresiva. Durante la internación todos los electrocardiogramas evidenciaron el QT corregido prolongado, pero la paciente no presentó un nuevo evento arrítmico. La paciente evolucionó desfavorablemente requiriendo fármacos vasoactivos en dosis máximas. Falleció a los 13 días de su admisión.
A 55-yr-old woman was taken to the hospital after recovering from a presyncopal episode. The electrocardiogram showed sinus bradycardia with QTc interval of 840 msec. Few minutes later, the patient developed a polymorphic ventricular tachycardia and subsequent cardiac arrest requiring cardiopulmonary resuscitation. A week later she presented with severe headache, seizures and decerebrate movements. Cranial computed tomography scan showed subarachnoid hemorrhage with intracranial hypertension requiring decompressive craniectomy. On the follow- up the electrocardiograms always showed prolonged QTc interval, without any new arrhythmic event. The patient's clinical course was unfavorable and required maximum dose of vasoactive drugs. She died 13 days after admission.
Subject(s)
Female , Humans , Middle Aged , Electrocardiography , Subarachnoid Hemorrhage/complications , Tachycardia, Ventricular/etiology , Tachycardia, Ventricular/physiopathologyABSTRACT
Existen varios factores predisponentes para el desarrollo de endocarditis infecciosa; entre ellos se destacan el antecedente de haber padecido endocarditis infecciosa y el recambio valvular con válvula protésica. La endocarditis infecciosa de válvula protésica producida por Salmonella es una entidad de muy baja incidencia. En esta presentación se describe el caso de una paciente con antecedente de doble recambio valvular, mitral y aórtico, que ingresó con un cuadro de sepsis grave. Se llegó al diagnóstico etiológico de endocarditis infecciosa por Salmonella enteritidis a través de hemocultivos. La paciente tuvo una evolución fulminante y falleció antes de las 24 horas.
There are several predisposing factors for the development of infectious endocarditis, among them, the history of infectious endocarditis and prosthetic valve replacement. Infectious endocarditis in prosthetic valve caused by Salmonella is an unusual entity. We report the case of a female patient with a history of double-valve mitral and aortic replacement, who was admitted due to severe sepsis. The etiological diagnosis of infectious endocarditis by Salmonella enteritidis was reached through blood cultures. The clinical course was fulminant and she died within the first 24 hours.
ABSTRACT
Existen varios factores predisponentes para el desarrollo de endocarditis infecciosa; entre ellos se destacan el antecedente de haber padecido endocarditis infecciosa y el recambio valvular con válvula protésica. La endocarditis infecciosa de válvula protésica producida por Salmonella es una entidad de muy baja incidencia. En esta presentación se describe el caso de una paciente con antecedente de doble recambio valvular, mitral y aórtico, que ingresó con un cuadro de sepsis grave. Se llegó al diagnóstico etiológico de endocarditis infecciosa por Salmonella enteritidis a través de hemocultivos. La paciente tuvo una evolución fulminante y falleció antes de las 24 horas.(AU)
There are several predisposing factors for the development of infectious endocarditis, among them, the history of infectious endocarditis and prosthetic valve replacement. Infectious endocarditis in prosthetic valve caused by Salmonella is an unusual entity. We report the case of a female patient with a history of double-valve mitral and aortic replacement, who was admitted due to severe sepsis. The etiological diagnosis of infectious endocarditis by Salmonella enteritidis was reached through blood cultures. The clinical course was fulminant and she died within the first 24 hours.(AU)
ABSTRACT
Antecedentes Los agentes inhibidores de la fosfodiesterasa 5, como el sildenafil, son vasodilatadores moderados ampliamente utilizados para el tratamiento de la disfunción eréctil. En la actualidad, la evidencia disponible establece su potencial aplicación en otras patologías, como la hipertensión pulmonar, la disfunción endotelial y la insuficiencia cardíaca crónica. Objetivo El presente estudio fue diseñado para comprobar si la administración de sildenafil en pacientes con insuficiencia cardíaca crónica en clase funcional II-III mejora la capacidad de ejercicio en comparación con placebo. Material y métodos Se seleccionaron en forma aleatoria 70 pacientes portadores de insuficiencia cardíaca crónica de cualquier etiología, excepto valvulares, todos con tratamiento óptimo. Para su inclusión en el estudio, los pacientes debían tener un diámetro diastólico ventricular izquierdo > 55 mm, una fracción de eyección < 35% y una presión arterial sistólica > 90 mm Hg. Se excluyeron los que se encontraban anémicos, aquellos con indicación de cirugía por cualquier causa o los que por diversos motivos no pudieran realizar una caminata de seis minutos. Luego de una caminata de seis minutos fueron aleatorizados para recibir 50 mg de sildenafil o placebo, conformándose dos grupos, placebo y sildenafil, ambos con 35 participantes. Luego de 1 hora de la ingestión de las drogas se realizó una nueva caminata de seis minutos. Antes y después de cada caminata se controlaron las siguientes variables: presión arterial sistólica, diastólica y frecuencia cardíaca; se registraron también los metros caminados en cada prueba. Resultados Características generales, grupo placebo versus grupo sildenafil: hombres: 74% vs 88%, etiología isquémico-necrótica: 71% vs 77%, clase funcional II: 37% vs 34%, clase funcional III: 63% vs 66%, edad: 68 ± 10 vs 68 ± 12 años, fracción de eyección: 26,5% ± 7,8% vs 26,5% ± 6,5%, diámetro diastólico ventricular izquierdo: 65 ± 6 vs 66 ± 9 mm (todas p = ns). Las variables del grupo placebo versus sildenafil antes de la primera caminata fueron: presión arterial sistólica: 115 ± 15 vs 115 ± 21 mm Hg y diastólica: 71 ± 10,5 vs 68 ± 13 mm Hg (ambas p = ns) y frecuencia cardíaca: 74 ± 13 vs 64 ± 6 (p < 0,001). Luego de la primera caminata y antes de la administración de las drogas: presión arterial sistólica: 126 ± 20 vs 133 ± 26 mm Hg, diastólica: 68 ± 11 vs 72 ± 15 mm Hg y frecuencia cardíaca 84 ± 2 vs 80 ± 9 (todas p = ns). Antes de la segunda caminata y luego de la administración de las drogas, grupo placebo versus sildenafil: presión arterial sistólica: 112 ± 14 vs 95 ± 18 mm Hg, diastólica: 69 ± 8 vs 57 ± 12 mm Hg (ambas p < 0,001) y frecuencia cardíaca: 73 ± 11 vs 75 ± 10 (p = ns). Finalmente, luego de la segunda caminata, presión arterial sistólica: 123 ± 17 vs 115 ± 26 mm Hg (p < 0,05), diastólica: 65 ± 7 vs 60 ± 12 mm Hg (p < 0,02) y frecuencia cardíaca: 84 ± 13 vs 86 ± 12 (p = ns). Cuatro pacientes (11%) en el grupo sildenafil presentaron cefalea y ninguno en el grupo placebo. No se registraron eventos mayores. El grupo sildenafil caminó 222 ± 69 metros antes y 313 ± 76 luego de la administración de la droga; la diferencia en metros fue de 91 ± 19. El grupo placebo caminó 233 ± 67 metros antes y 242 ± 67 luego de la administración de la droga; la diferencia en metros fue de 9 ± 5. Al comparar estos resultados, la diferencia en metros recorridos resultó significativa a favor del grupo sildenafil: 91 ± 19 vs 9 ± 5 (p < 0,0001). Conclusiones En pacientes con insuficiencia cardíaca en clase funcional II-III bajo tratamiento óptimo, el sildenafil mejoró la capacidad de ejercicio en comparación con placebo.
Background Phosphodiesterase type 5 inhibitors, as sildenafil, are moderate vasodilators widely used for erectile dysfunction. The evidence currently available establishes that they are potentially useful to treat other conditions like pulmonary hypertension, endothelial dysfunction and chronic heart failure. Objective To evaluate whether sildenafil is useful to improve exercise capacity compared to placebo in patients with chronic heart failure in functional class II-III. Material and Methods A total of 70 patients with chronic heart failure of any etiology, excluding valvular heart disease, were randomly selected. All patients were receiving optimal medical treatment. Patients were included if they had a left ventricular-diastolic diameter of 55 mm, an ejection fraction <35% systolic blood pressure >90 mm Hg. Patients with anemia, an indication of surgery due to any cause, and those unable to undergo a 6-minute walk test were excluded from the study. After the 6-minute walk test, the patients were randomly assigned to receive 50 mg of sildenafil (sildenafil group) or placebo (placebo group); each group had 35 patients. A second 6-minute walk test was performed 1 hour after the drug was administered. The following variables were evaluated before and after each test: systolic blood pressure, heart rate and the distance walked in meters in each test. Results General characteristic, placebo group versus sildenafil group: men: 74% vs. 88%, ischemic dilated cardiomyopathy: 71% vs. 77%, functional class II: 37% vs. 34%, functional class III: 63% vs. 66%, age: 68±10 vs. 68±12 years, ejection fraction: 26.5%±7.8% vs. 26.5%±6.5%, left ventricular end-diastolic diameter: 65±6 vs. 66±9 mm (all p = ns). Before the fírst 6-minute walk test, the following variables were measured in the placebo versus the sildenafil group: systolic blood pressure: 115±15 vs. 115±21 mm Hg; diastolic blood pressure: 71±10.5 vs. 68±13 mm Hg (both p = ns); heart rate: 74±13 vs. 64±6 (p <0.001). After the first test and before drug administration: systolic blood pressure: 126±20 vs. 133±26 mm Hg, diastolic blood pressure: 68±11 vs. 72±15 mm Hg; heart rate 84±2 vs. 80±9 (all p = ns). Before the second test and after drug administration, placebo versus sildenafil: systolic blood pressure: 112±14 vs. 95±18 mm Hg; diastolic blood pressure: 69±8 vs. 57±12 mm Hg (both p <0.001); heart rate: 73±llvs. 75±10 (p = ns). Finally after the second walk test: systolic blood pressure: 123±17 vs. 115±26 mm Hg (p <0.05), diastolic blood pressure: 65±7 vs. 60±12 mm Hg (p <0.02) and heart rate: 84±13 vs. 86±12 (p = ns). The incidence of headache was 11% (4 patients) in the sildenafil group and 0% in the placebo group. No major events were reported. The sildenafil group walked 222±69 and 313±76 meters before and after drug administration, respectively; the difference was 91±19 meters. The placebo group walked 233±67 and 242±67 meters before and after drug administration, respectively; the difference was 9±5 meters. The difference in the distance walked was greater in the sildenafil group: 91±19 vs. 9±5 (p <0.0001). Conclusions In patients with heart failure in functional class II-III under optimal medical therapy, sildenafil improved exercise capacity compared to placebo.
ABSTRACT
Introducción La presión del pulso depende en gran medida de la rigidez arterial. Varios estudios se han centrado en el hecho de que diversos factores, entre ellos el síndrome metabólico o sus componentes, intermedian cambios que afectan en forma adversa las propiedades elásticas de las grandes arterias, acentuando su rigidez. Objetivo El propósito de este trabajo de investigación fue evaluar la influencia del síndrome metabólico y sus componentes sobre la presión del pulso en personas sin enfermedad aparente. Material y métodos Se seleccionaron al azar 1.155 individuos sin enfermedad demostrable. Se registraron las variables que definen el síndrome metabólico (ATP III): en mg/dl y en ayunas, colesterol HDL ≤ 40/50 (hombres/mujeres), triglicéridos ≥ 150, glucemia ≥ 100, perímetro de la cintura (cm) ≥ 102/88 (hombres/mujeres) y presión arterial sistólica/diastólica ≥ 130/85 mm Hg. Se compararon los valores de la presión del pulso obtenidos al agrupar a los participantes por sexo y edad. Se estableció la frecuencia de los factores que definen el síndrome metabólico y mediante regresión lineal se ajustó la presión del pulso por sexo, edad y por el conjunto de ellos. A continuación se determinó el valor ajustado de la presión del pulso correspondiente a cada factor del síndrome metabólico y se comparó con el de sujetos normales. Finalmente, se calculó la presión del pulso ajustada de acuerdo con las posibles combinaciones de tres o más factores (criterio diagnóstico de síndrome metabólico) y se comparó con la de individuos en los que no se hallaba presente ningún componente del síndrome. Resultados Características generales de los 1.155 individuos: hombres 62%, edad 38 ± 9 años (rango 20-66), perímetro de la cintura 89 ± 13 cm, triglicéridos 107 ± 74 mg/dl, glucemia 82 ± 16 mg/dl, colesterol HDL 48 ± 13 mg/dl, presión arterial sistólica 124 ± 14 mm Hg, diastólica 78 ± 9 mm Hg, presión del pulso 46 ± 9 mm Hg. Edad: 38 ± 9 años los hombres (n = 712) y 37 ± 9 años las mujeres (n = 443); p = ns. La presión del pulso fue de 48 ± 8 mm Hg en los hombres versus 43 ± 9 mm Hg en las mujeres; p < 0,001. Efecto de la edad sobre la presión del pulso: 45 ± 8 en individuos < 35 años versus 47 ± 9 en ≥ 35 años; p <0,001. Frecuencia de los distintos elementos que definen el síndrome metabólico: perímetro de la cintura ≥ 102/88 cm: 18%, glucemia ≥ 100 mg/dl: 7%, triglicéridos ≥ 150 mg/dl: 17%, colesterol HDL ≤ 40/50 mg/dl: 45%, presión arterial sistólica≥ 130 mm Hg: 40%, diastólica ≥ 85 mm Hg: 16%. Al comparar la presión del pulso ajustada delimitada por cada factor del síndrome metabólico con la de los controles se obtuvo: perímetro de la cintura ≥ 102/88 cm: 48 ± 4 versus 46 ± 3, glucemia ≥ 100 mg/dl: 52 ± 5 versus 46 ± 3, triglicéridos ≥ 150 mg/dl: 48 ± 3 versus 46 ± 4, colesterol HDL ≤ 40/50 mg/dl: 44± 3 versus 47 ± 3; presión arterial sistólica ≥ 130 mm Hg: 48 ± 4 versus 45 ± 3; diastólica ≥ 85 mm Hg: 48 ± 5 versus 46 ± 3, todas p < 0,001. Por último, se comprobó la presión del pulso ajustada de acuerdo con las posibles combinaciones de tres o más factores y se comparó con la de individuos en los que no se hallaba presente ningún componente del síndrome metabólico; el resultado fue 49 ± 5 versus 46 ± 3, p < 0,001. Conclusiones El síndrome metabólico y/o sus componentes individuales inducen una elevación de la presión del pulso, a excepción del colesterol HDL. Este efecto parece ser independiente de la edad, del sexo y de la eventual interacción entre las variables analizadas.
Background Pulse pressure depends mostly on arterial wall stiffness. Several studies have focused on the fact that many factors, including the metabolic syndrome or its components, interact to impact on great vessels elastic properties, increasing arterial wall stiffness. Objective To evaluate the influence of the metabolic syndrome and its components on pulse pressure in persons without any apparent disease. Material and Methods A total of 1.155 subjects without demonstrable disease were randomly selected. The metabolic variables defining metabolic syndrome (ATP III) were recorded: fasting HDL-cholesterol ≤40/50 mg/dl (men/women), fasting triglycerides≥150 mg/dl, fasting glycemia ≥100 mg/dl, waist circumference ≥102/88 cm (men/women) and systolic/diastolic blood pressure ≥130/85 mm Hg. Patients' pulse pressure values were compared among different groups according to gender and age. The frequency of the metabolic syndrome components was determined and pulse pressure was adjusted by gender, age and all the components using multiple linear regression analysis. The adjusted value of pulse pressure corresponding to each metabolic syndrome component was determined and compared to that of normal subjects. Finally, adjusted pulse pressure was calculated according to the possible combinations of three factors or greater (diagnostic criteria of metabolic syndrome) and was compared with that of individuals without any component of the metabolic syndrome. Results General characteristics of the 1.155 individuals: men 62%, age 38±9 years (range 20-66), waist circumference 89±13 cm, triglycerides 107±74 mg/dl, glycemia 82±16 mg/dl, HDL-cholesterol 48±13 mg/dl, systolic blood pressure 124±14 mm Hg, diastolic blood pressure 78±9 mm Hg, pulse pressure 46±9 mm Hg. Age: 38±9 years in men (n=712) and 37±9 years in women (n=443); p=ns. Pulse pressure was 48±8 mm Hg in men versus 43±9 mm Hg in women; p<0.001. Influence of age on pulse pressure: 45±8 in individuals <35 years versus 47±9 in ≥35 years; p<0.001. Frequency of metabolic syn- drome components: waist circumference ≥102/88 cm: 18%, glycemia ≥100 mg/dl: 7%, triglycerides ≥150 mg/dl: 17%, HDL-cholesterol ≤40/50 mg/dl: 45%, systolic blood pressure≥130 mm Hg: 40%, diastolic blood pressure ≥85 mm Hg: 16%. When pulse pressure adjusted by each component of the metabolic syndrome was compared to that of controls, the following values were obtained: waist circumference≥102/88 cm: 48±4 versus 46±3, glycemia ≥100 mg/dl: 52±5 versus 46±3, triglycerides ≥150 mg/dl: 48±3 versus 46±4, HDL-cholesterol ≤40/50 mg/dl: 44±3 versus 47±3; systolic blood pressure ≥130 mm Hg: 48±4 versus 45±3; diastolic blood pressure ≥85 mm Hg: 48±5 versus 46±3, all p<0.001. Finally, adjusted pulse pressure according to the possible combinations of three factors or greater was calculated and compared with that of individuals without any component of the metabolic syndrome: 49±5 versus 46±3, p<0,001. Conclusions The metabolic syndrome and/or its components induce pulse pressure elevation, except for HDL-cholesterol. This effect seems to be independent of age, gender and the eventual interaction of the variables analyzed.
ABSTRACT
Introducción La hipertensión arterial con frecuencia coexiste con otros factores de riesgo cardiovascular, principalmente obesidad y dislipidemia; ésta es una conexión que eleva el riesgo, especialmente en los pacientes que ya tienen enfermedad cardiovascular, y por ello su identificación y control son esenciales para el manejo global de los pacientes hipertensos. Objetivos Evaluar la prevalencia de hipertensión arterial según los distintos componentes del síndrome metabólico y establecer su vínculo con ellos. Material y métodos Se incluyeron 975 individuos (37 ± 9 años, 62% hombres) sin enfermedad demostrable. Se registraron las variables que conforme al sexo definen el síndrome metabólico (ATPIIIIDF): perímetro de cintura ³ 102/88 cm, lipoproteínas de alta densidad £ 40/50 mg/dl, glucemia ³ 100 mg/dl y triglicéridos ³ 150 mg/dl. Se agruparon a los participantes por sexo y se clasificaron en hipertensos (JNC 7), con tensión arterial ³ 140/90 mm Hg, y en no hipertensos o controles. Se estableció la frecuencia de cada elemento del síndrome metabólico entre hipertensos y se determinó la prevalencia de hipertensión según cada componente. Resultados Entre los hombres de la población en estudio se hallaron 114 hipertensos que se compararon con 495 controles: edad: 42 ± 10 versus 36 ± 9 años, perímetro de cintura ³ 102 cm: 31% versus 15%, triglicéridos ³ 150 mg/dl: 33% versus 20%, glucemia ³ 100 mg/dl: 30% versus 4%; todas p < 0,001. Entre las mujeres hubo 35 hipertensas que se confrontaron con 331 no hipertensas: edad 43 ± 9 versus 35 ± 8 años y perímetro de cintura ³ 88 cm: 49% versus 15%; ambas, p < 0,001. La prevalencia de hipertensión entre hombres fue: del 19% general, del 32% con perímetro de cintura ³ 102, del 28% con triglicéridos ³ 150, del 63% con glucemia ³ 100; todas p < 0,03 versus general. En las mujeres, la prevalencia de hipertensión fue: del 11% general, del 25% con perímetro de cintura ³ 88; p < 0,0008. El análisis multivariado demostró que la edad, la glucemia ³ 100 mg/dl, los triglicéridos ³ 150 mg/dl y el perímetro de cintura ³ 102/88 cm son predictores independientes de hipertensión arterial. Conclusiones Los componentes del síndrome metabólico son más frecuentes entre los hipertensos. Además, particularmente en los hombres, determinan una prevalencia mayor de hipertensión arterial.
Background Hypertension coexists with other cardiovascular risk factors, especially obesity and dyslipemia; this association increases the risk particularly in patients with established heart disease. For this reason, the identification and control of these factors is essential for the global management of hypertensive patients. Objectives To assess the prevalence of hypertension and its association with the different components of the metabolic syndrome. Material and Methods We included 975 subjects (37±9 years, 62% were men) without demonstrable heart disease. Metabolic syndrome variables were those defined by the ATP III-IDF according to gender: waist circumference ³102/88 cm, LDL-cholesterol level £40/50 mg/dl, glucose blood level and triglycerides ³150 mg/dl. Subjects were grouped by gender and classified as hypertensive (JNC 7), with blood pressure ³140/90 mm Hg, non hypertensive and controls. The frequency of each variable of the metabolic syndrome was established in hypertensive subjects and the prevalence of hypertension was determined for each variable. Results There were 114 hypertensive men that were compared to 495 controls: age: 42±10 versus 36±9 years, waist circumference ³102 cm: 31% versus 15%, triglycerides ³150 mg/dl: 33% versus 20%, glycemia ³100 mg/dl: 30% versus 4%; p<0.001 for all the variables. We found 35 women with hypertension that were compared to 331 non-hypertensive women: age 43±9 versus 35±8 years, and waist circumference ³88 cm: 49% versus 15%; both, p<0.001. The prevalence of hypertension among all men was 19%; 32% in those with a waist circumference of ³102; 28% with triglycerides ³150; 63% with glycemia of ³100; p<0.03 for all versus general. Among all women, the prevalence of hypertension was 11%, 25% in those with a waist circumference of ³88; p<0.0008. Multivariate analysis showed that age, glucose blood levels ³100 mg/dl, triglycerides ³150 mg/dl and a waist circumference ³102/88 cm are independent predictors of hypertension. Conclusions The components of the metabolic syndrome are more frequent among subjects with hypertension. In addition, they determine a greater prevalence of hypertension, particularly in men.