ABSTRACT
Introduction: Electric burns are complex lesions with multiple complications. Cataracts are an infrequent complication. There are several case reports, but very few information of its phisiopatology and clinical characteristics in the surgical literature. Objectives: To report the incidence and characteristics of patients admitted to Hospital del Trabajador de Santiago (HTS) with electric burns and secondary cataracts. And review the literature. Patients and Methods: All patients admitted to the HTS with electric burns between 01/01/1999 and 01/01/2009 were included. Their electronic files were reviewed, and their data were tabulated in an Excel sheet. The literature about electric burns and cataracts was reviewed. Results: There were 977 patients admitted with electric burns in the last 10 years, 3 (0.3 percent) of them developed secondary cataracts. All were male, 33, 36 and 64 years old. Two of them had facial burns, only one had the description of the voltage (13.500 v). The time between the burn and the diagnostic of cataract was 6 month, 2 and 4 years. In two cases the cataracts were bilateral and in one case it was unilateral and right sided. All patients received surgical treatment with satisfactory outcomes. Conclusions: Cataracts secondary to electric burns are infrequent. We need more numerous series, with accurate registers to establish some prognostic factors. It is important to have in mind this complication and actively look for it in patients that present with electric burns.
Introducción: Las quemaduras eléctricas producen lesiones complejas con múltiples complicaciones. Las cataratas son una complicación infrecuente. Existen varios reportes de casos, pero escasa difusión en el ámbito quirúrgico de sus características y fisiopatología. Objetivo: Reportar la incidencia y características de la población atendida en el Hospital del Trabajador de Santiago (HTS) con diagnóstico de catarata secundaria a quemadura eléctrica, y presentar una revisión de la literatura sobre el tema. Pacientes y Métodos: Se incluyeron todos los pacientes admitidos al HTS con diagnóstico de quemadura eléctrica, entre el 01/01/1999 y el 01/01/2009. Se revisaron sus archivos electrónicos y se tabularon en una base de datos Excel. Se realizó una revisión sobre el tema. Resultados: En los últimos 10 años ingresaron 977 pacientes con diagnóstico de quemadura eléctrica, de ellos, 3 (0,3 por ciento) tenían cataratas secundarias. Todos de sexo masculino, de 33, 36 y 64 años. En dos de ellos se reportan quemaduras faciales al ingreso y sólo en uno se describe el voltaje de la quemadura (13.500 v). El tiempo transcurrido entre la quemadura eléctrica y el diagnóstico de catarata fue de 6 meses, 2 y 4 años. En dos casos la catarata desarrollada fue bilateral y en un caso fue unilateral derecha. Todos los pacientes recibieron tratamiento quirúrgico con resultados satisfactorios. Conclusiones: Las cataratas secundarias a quemadura eléctrica son poco frecuentes. Hacen falta series más numerosas, con un buen registro, para poder establecer factores pronósticos. Es importante tener presente esta complicación y buscarla dirigidamente en los pacientes con quemadura eléctrica.
Subject(s)
Humans , Male , Adult , Middle Aged , Cataract/etiology , Burns, Electric/complications , Cataract Extraction , Cataract/epidemiology , Incidence , Burns, Electric/epidemiologyABSTRACT
Introducción: La litiasis de la vesícula biliar es una patología de alta prevalencia en Chile. Más de un tercio de las mujeres adultas presentan esta patología durante su vida. En los pacientes con colelitiasis, hasta un cuarto de ellos puede presentar en forma concomitante colédocolitiasis, lo que plantea en este grupo la necesidad de estudio preoperatorio selectivo del colédoco para determinar la presencia de cálculos. Material y método: Se revisaron en forma retrospectiva los informes de CRM (Colangio Resonancia Magnética) y de CER (Colangiografía Endoscópica Retrógada) realizadas en pacientes con sospecha de obstrucción de la vía biliar entre los años 2004 y 2006. De un total de 130 casos analizados se excluyeron 72 pacientes, quedando en la serie 58 casos cuyos datos fueron tabulados y posteriormente analizados con el software Microsoft Excel. La significancia estadística se calculó mediante la confección de intervalos de confianza y la prueba de Chi cuadrado. Resultados: Con los datos recabados, se calculó el rendimiento de la CRM para colédocolitiasis, tomando como técnica de referencia los hallazgos a la CER Hubo concordancia entre CRM y CER en 52 de los 58 pacientes de la serie (89,6 por ciento). La sensibilidad de la CRM alcanzó un 93,3 por ciento con IC (95 por ciento) entre 83,8 por ciento y 97,3 por ciento, y una especificidad de 76,9 por ciento con IC (95 por ciento) entre 64,5 por ciento y 85,8 por ciento. El valor predictivo positivo (VPP) alcanzó un 93,3 por ciento, y el valor predictivo negativo (VPN) un 76,92 por ciento. Conclusiones: La CRM, parece un buen método de imágenes para establecer el diagnóstico preoperatorio de colédocolitiasis cuando es positiva.
Background: Approximately 25 percent of patients with cholelithiasis have choledocolithiasis simultaneously. Therefore this condition must be correctly diagnosed in the preoperative period. Aim: To assess the yield of magnetic resonance cholangiography (MRC) for the diagnosis of choledocolithiasis in patients with cholelithiasis. Material and methods: Retrospective review of magnetic resonance cholangiography and endoscopio retrograde cholangiography (ERCP) performed in patients with suspicion of biliary tract obstruction,. The yield of MRC was calculated using ERCP as the gold standard. Results: One hundred thirty patients with both procedures were identified, but 72 had to be excluded. Therefore the analysis was done in 58 patients aged 23 to 87 years (36 males). There was a concordance between MRC and ERCP in 52 patients (90 percent). Thus, MRC sensitivity was 93 percent (95 percent confidence intervals (Cl) 84-97 percent), specificity was 77 percent (95 percentCI 65-86 percent), positive predictive value was 93 percent and negative predictive value was 77 percent. Conclusions: MRC has a good positive predictive value for choledocolithiasis.
Subject(s)
Humans , Male , Female , Adult , Middle Aged , Aged, 80 and over , Cholangiopancreatography, Endoscopic Retrograde , Choledocholithiasis/diagnosis , Magnetic Resonance Imaging/methods , Chile/epidemiology , Choledocholithiasis , Predictive Value of Tests , Retrospective Studies , Sensitivity and SpecificityABSTRACT
Resumen: La enfermedad de Caroli corresponde a la dilatación sacular congénita de la vía biliar intrahepática. Objetivo: Revisar la experiencia del Servicio de Cirugía del Hospital Clínico de la Universidad de Chile en el diagnóstico y tratamiento quirúrgico de esta enfermedad entre 1994 y 2005. Resultados: La serie consta de 18 pacientes, 11 mujeres (61,1 por ciento) y 7 hombres (38,8 por ciento), con 49.8 + 14,5 años de edad promedio. El principal síntoma de presentación fue el dolor abdominal en 16 de 18 pacientes (88,8 por ciento). La enfermedad se presentó localizada en 16 de 18 pacientes (14 lob. izquierdo y 2 lob. derecho), y generalizada en 2. El 100 por ciento de los pacientes fueron estudiados con algún método de imagen, siendo el más usado la ecografía abdominal (10 de 18). Los hallazgos más comunes fueron dilatación de la vía biliar intrahepática, litiasis intrahepática, e imágenes quísticas. El diagnóstico fue confirmado por Colangiografía Endoscópica Retrógrada (CER) o Colangio Pancreato Resonancia Magnética (CPRM) en 10 de 18 pacientes. Todos los enfermos recibieron tratamiento quirúrgico, 17 de ellos (94,4 por ciento) segmentectomía y 1 (5,88 por ciento) destechamiento de quiste. La cirugía duró en promedio 3,4 horas, y la hospitalización 8,7 días. La incidencia de complicaciones fue 11,76 por ciento. No hubo mortalidad en el intra o postoperatorio. El seguimiento promedio fue de 29,38 meses, encontrándose aparición de enfermedad en el lóbulo hepático contralateral en un paciente.
Background: Caroli disease is a congenital sacular dilatation of intrahepatic bile tract. Aim: To report a series of patients with Caroli disease. Material and methods: Retrospective review of medical records of patients with a pathological diagnosis of Caroli disease, operated in a surgical service, between 1994 and 2005. Results:Ne report 18 patients aged 50 + 14 years (11 women). The main presentation symptom was abdominal pain in 16 patients (89 percent). The disease was localized in 16 patients (in the left lobe in 14 and in the right lobe in 2) and generalized in two. The most common findings in abdominal ultrasound or CAT scan, were intrahepatic bile tract dilatation, intrahepatic lithiasis and cystic images. The diagnosis was confirmed by endoscopio retrograde colangiography in six patients and magnetic resonance of the bile tract in four. Seventeen patients were subjected to a segmentectomy and one to a cyst resection. Mean operative time and hospital stay were 3.4 hours and 8.7 days, respectively. No patient died. Patients were followed for a mean of 30 months and in one, the disease reappeared in the contralateral lobe. Conclusions: Partial hepatectomy is a definitive treatment for localized Caroli disease, with a low incidence of complications and mortality
Subject(s)
Humans , Male , Female , Adolescent , Adult , Middle Aged , Caroli Disease/surgery , Caroli Disease/diagnosis , Chile/epidemiology , Abdominal Pain/etiology , Caroli Disease/complications , Follow-Up Studies , Length of Stay , Retrospective Studies , Treatment OutcomeABSTRACT
Introduction: intake of Folic Acid (FA) before conception and during early pregnancy reduces the incidence of neural tube defects (NTD). In Chile the management of the pregnant adolescent women is a relevant public health problem. So, the aim of this study was to determine the level of knowledge and intake of FA in a sample of adolescent and older parturient. Methods: a survey was conducted in one group of teenagers (group A) and another group of older puerperal (group B) corresponding to four public maternities of Santiago. Results: finally, 79 teenagers and 263 older women were surveyed. Both groups showed a poor knowledge about the benefit of intake of FA during this period. Regarding the control before pregnancy, we found an attendance of 10.1 percent in the group A and 24.7 percent in the group B, whereas only 5.1 percent of the group A and 1.9 percent of the group B had an intake of FA according to the medical recommendation. Conclusion: our patients have scanty information about the benefits of the periconceptional intake of FA. It seems necessary to design new methods and tools in order to increase the use of the FA in women of childbearing age, especially in the groups at risk for NTD.