ABSTRACT
El advenimiento de la alta resolución de imágenes obtenidas por ecografía transrectal durante la década del 80, permitió correlacionar áreas anatómicas de la próstata que guardan relación con su estructura histológica. Esta es la causa que da lugar al esquema propuesto por Mc Neal que deja en desuso la clásica distribución lobar de Gil Vernet. El motivo de esta compartimentalización es poder relacionar las distintas patologías según el tejido en el que se asientan. El objetivo de nuestro trabajo es ilustrar la correspondencia entre el esquema de zonificación anatómica propuesto por Mc Neal y las imágenes obtenidas con la ecografía transrectal con transductor biplanar, estudiando 283 pacientes cuyas edades fueron de 48 a 86 años, con una media de 64 años. Se concluye que las lesiones diagnosticadas en la zona periférica corresponden a adenocarcinoma y prostatitis, no registrándose hipertrofias benignas, mientras que las lesiones diagnosticadas en la zona de transición resultaron en su gran mayoría hipertrofia benigna adenomatosa, encontrándose una mínima proporción de patología neoplásica
Subject(s)
Humans , Male , Middle Aged , Prostatic Diseases , Prostate , Prostatic Hyperplasia , Prostatic Neoplasms , Ultrasonography/standards , Prostatic Diseases/diagnosis , Prostate/anatomy & histology , Prostatic Hyperplasia/diagnosis , Prostatic Neoplasms/diagnosis , UltrasonographyABSTRACT
El advenimiento de la alta resolución de imágenes obtenidas por ecografía transrectal durante la década del 80, permitió correlacionar áreas anatómicas de la próstata que guardan relación con su estructura histológica. Esta es la causa que da lugar al esquema propuesto por Mc Neal que deja en desuso la clásica distribución lobar de Gil Vernet. El motivo de esta compartimentalización es poder relacionar las distintas patologías según el tejido en el que se asientan. El objetivo de nuestro trabajo es ilustrar la correspondencia entre el esquema de zonificación anatómica propuesto por Mc Neal y las imágenes obtenidas con la ecografía transrectal con transductor biplanar, estudiando 283 pacientes cuyas edades fueron de 48 a 86 años, con una media de 64 años. Se concluye que las lesiones diagnosticadas en la zona periférica corresponden a adenocarcinoma y prostatitis, no registrándose hipertrofias benignas, mientras que las lesiones diagnosticadas en la zona de transición resultaron en su gran mayoría hipertrofia benigna adenomatosa, encontrándose una mínima proporción de patología neoplásica (AU)