ABSTRACT
Los padecimientos autoinmunitarios suelen ser un reto diagnóstico para los médicos en general, pero cuando dichos padecimientos comparten ciertas características clínicas y de laboratorio esto es todavía más difícil. El médico internista suele enfrentarse con estas enfermedades en sus etapas iniciales y es quien decide la subespecialidad a la que debe ser enviado el paciente y, en ocasiones, principia el manejo diagnóstico y terapéutico. Lo poco común de las enfermedades de este tipo, como el síndrome de Evans, suele llevar a cometer errores diagnósticos y terapéuticos, por lo que se presenta una revisión de los criterios diagnósticos de éste y del síndrome de anticuerpos antifosfolípido primario, así como del lupus eritematoso generalizado y se proporcionan los pasos iniciales que se deben seguir en el manejo de estos pacientes.