ABSTRACT
No disponible
Subject(s)
Humans , Meningococcal Infections/genetics , Complement C5/deficiency , Immune System Diseases/genetics , Neisseria meningitidis/pathogenicity , Risk FactorsABSTRACT
Las quemaduras de causa accidental continúan afectando de forma frecuente a los niños, a pesar de las diversas campañas de prevención que se llevan a cabo. El niño afectado de quemaduras graves (más del 10% de superficie corporal quemada) puede requerir una suplementación férrica adecuada, sobre todo en la fase postestrés o de recuperación. Se describe el caso de un niño varón de 15 meses de edad afectado de politraumatismo y quemaduras del 20% de extensión corporal. Al octavo día de su ingreso en la Unidad de Quemados pediátrica se practicó autoinjerto laminar, precisando transfusión de concentrado de hematíes. A los 15 días de evolución mostraba una hemoglobina disminuida de 9,3 g/dl, contenido de hemoglobina reticulocitaria disminuida de 26,2 pg (valores normales [VN], 27,2-30 pg) y volumen corpuscular medio reticulocitario elevado de 124 fl (VN, 101-108 fl), por lo que a pesar de unos valores elevados de ferritina (219 mg/ml) se interpretó como insuficiencia funcional del hierro. Se destaca la evolución satisfactoria hematológica, con aparición de crisis reticulocitaria y normalización de los parámetros hematológicos, con la administración únicamente de 0,5 mg/kg/día de sulfato ferroso más el hierro correspondiente a la fórmula de continuación y la alimentación normal para su edad (AU)