ABSTRACT
El carcinoma de origen desconocido constituye entre el 5 y el 10 por ciento de todos los tumores sólidos. Presenta un comportamiento muy agresivo y una evolución clínica atípica respecto a otros tumores metastásicos con un tumor primario conocido. El papel del patólogo en el proceso diagnóstico es fundamental y se requiere una estrecah colaboración entre éste y el clínico. La búsqueda a ciegas del tumor primario ha demostrado una limitada rentabilidad diagnóstica y una escasa relación coste-beneficio en cuanto a supervivencia, por lo que el objetivo del médico debe ser la identificación de subgrupos de pacientes potencialmente tratables aunque, de forma infructuosa, el 60 por ciento de los pacientes no pertenece a ninguno de ellos. Aun sin existir tratamiento específico frente a esta entidad, la utilización de nuevas combinaciones terapéuticas basadas en taxanos y gemcitabina parece asociarse a un mayor beneficio clínico y a una mayor supervivencia (AU)