ABSTRACT
Introduction: The gag reflex is a protection mechanism that prevents food and unwanted agents from entering the lower airways. It is usually part of the physical examination of swallowing to detect oropharyngeal dysphagia, but it is a potentially ambiguous sign. Objective: To evaluate the diagnostic value of the gag reflex in patients with neurogenic oropharyngeal dysphagia and adults without it. Materials and methods: We conducted an analytical observational study in patients with neurogenic oropharyngeal dysphagia (cases) and patients without dysphagia (controls). We evaluated the absence or presence of the reflex bilaterally, by direct visualization, and adjusted it according to sex, age, and other interaction variables. Results: We included 86 patients with neurogenic oropharyngeal dysphagia and 80 control subjects. The gag reflex on swallowing physical examination showed a positive relationship with the patients (right side: OR = 3.97; 95 % CI: 2.01-7.84; left side: OR = 4.84; 95 % CI: 2.41-9.72), but a negative association with the control group. In both groups, neither sex, nor age, nor other interaction variables modified the gag reflex. Conclusions: The gag reflex absence or presence does not confirm or exclude the existence of oropharyngeal dysphagia due to neurological and neuromuscular causes. Therefore, health professionals must not rely on this reflex. Clinicians must go beyond a simple reflex revision, even in neurological patients where it is supposed to be absent.
Introducción. El reflejo nauseoso es un mecanismo de protección que impide que alimentos y agentes no deseados penetren en la vía aérea inferior. Usualmente, hace parte del examen físico de la deglución para detectar la disfagia orofaríngea, pero es un signo potencialmente ambiguo. Objetivo. Evaluar el valor diagnóstico del reflejo nauseoso en pacientes con disfagia orofaríngea neurogénica y en pacientes sin ella. Materiales y métodos. Se trata de un estudio observacional, analítico, en pacientes con disfagia orofaríngea neurogénica (casos) y en personas sin disfagia (controles), en el cual se evaluó por visualización directa la ausencia o la presencia del reflejo nauseoso de forma bilateral. Este resultado se ajustó por sexo, edad y otras variables de interacción. Resultados. Se evaluaron 86 pacientes con disfagia orofaríngea neurogénica y 80 personas sin ella. En el examen físico de la deglución, la presencia del reflejo mostró una relación positiva con los pacientes (lado derecho: OR = 3,97; IC95%: 2,01-7,84; lado izquierdo: OR = 4,84; IC95%: 2,41-9,72), pero una asociación negativa con los controles. En ambos grupos, ni el sexo ni la edad, ni otras variables de interacción modificaron el reflejo nauseoso. Conclusiones. La ausencia o la presencia del reflejo nauseoso no confirma ni excluye la existencia de una disfagia orofaríngea por causas neurológicas o neuromusculares; por lo tanto, no es recomendable que los profesionales de la salud se fíen del resultado de este reflejo. Los médicos tratantes deben ir más allá de una simple revisión del reflejo nauseoso, incluso en pacientes neurológicos en quienes se supone que debería estar ausente.