RESUMEN
Pancreas transplant (PTx) is the only treatment that establishes normal glucose levels for patients diagnosed with diabetes types 1 and 2. The paper aims to review and analyze graft survival, patient survival, and the impact on diabetic complications. We describe that the graft survival was 82-98% at 1 year, 90% at 5 years, and 75-54% at 10 years for simultaneous pancreas-kidney recipient; 71% pancreas after kidney (PAK), and 62% PTx alone at 1 year. Patient survival: At 1 year for recipients was 96.9% simultaneous pancreas-kidney transplantation (SPK); for PAK transplantation recipients, 96.3%; and for PTx alone recipients, 98.3%. In general, the pancreas transplantation improves and reverses diabetic complications. Finally, the pancreatic transplant is a morbid procedure and emerges as a significant alternative in diabetes management, directly competing with conventional insulin therapies. Results so far suggest that the most effective transplant model is the SPK. While more patients could benefit from this procedure, surgical complications and the need for immunosuppression pose significant challenges.
El trasplante de páncreas es el único tratamiento que estabiliza los niveles normales de glucosa en los pacientes diagnosticados con diabetes tipo 1 o tipo 2. En esta revisión se analizan la supervivencia del injerto, la supervivencia del paciente y el impacto en las complicaciones diabéticas. Se describe la supervivencia del injerto: 82-98% al año para los receptores de trasplante simultáneo de páncreas y riñón, 71% para trasplante páncreas después de riñón y 62% para trasplante de páncreas solitario al año. Supervivencia de los pacientes a 1 año: 96.9% para los receptores de trasplante simultáneo de páncreas y riñón, 96.3% para los receptores de trasplante de páncreas después de riñón y 98.3% para los receptores de páncreas solitario. En general, el trasplante de páncreas mejora y revierte las complicaciones diabéticas. Finalmente, el trasplante de páncreas, un procedimiento mórbido, surge como una alternativa significativa en el manejo de la diabetes, compitiendo directamente con las terapias convencionales de insulina. Hasta ahora, los resultados indican que el modelo de trasplante más efectivo es el simultáneo de páncreas y riñón. Aunque más pacientes podrían beneficiarse de este procedimiento, las complicaciones quirúrgicas y la necesidad de inmunosupresión plantean desafíos significativos.