Topiramato como coadyuvante en el tratamiento del trastorno por dependencia de alcohol en pacientes no respondedores: un estudio de 12 meses / Topiramate as add-on therapy in non-respondent alcohol dependant patients: a 12 month follow-up study

Introducción. El topiramato es un fármaco neuromodulador que posee diferentes mecanismos de acción que podrían estar implicados en la dependencia alcohólica. Se ha estudiado su utilidad tanto en estudios abiertos como en un ensayo doble ciego. Método. Se estudió en un grupo de pacientes ya en tratamiento por dependencia alcohólica (criterios CIE-10) con mala evolución (n=64) la utilidad y tolerabilidad del topiramato como coadyuvante en el programa de deshabituación mediante un estudio multicéntrico, abierto y prospectivo de 12 meses de duración. Para medir los resultados clínicos se utilizaron una escala visual de craving (EVC), una escala visual de priming (EVP), la Escala de Intensidad de dependencia alcohólica (EIDA), el número de días que bebían al mes y la cantidad bebida por el día en unidades de bebida estándar (UBE), así como parámetros analíticos como las transaminasas. Resultados. El topiramato redujo de forma significativa (p<0,001) todas las variables estudiadas, tanto las derivadas de las Escalas visuales Craving y Priming y la EIDA como el número bebidas/día y las UBE/día consumidas, así como los valores del volumen corpuscular medio y la gamma-glutamiltransferasa. La dosis media final fue algo inferior a 200 mg/día. Sólo tres pacientes abandonaron por intolerancia. Conclusiones. El topiramato mostró en condiciones asistenciales reales una buena respuesta clínica, medida tanto con la disminución de puntuación en escalas de dependencia y de craving-priming como con las bebidas referidas y las transaminasas, y parece ser un fármaco útil y bien tolerado para tratar a pacientes que presentan dependencia alcohólica y no responden adecuadamente a terapias estándar

Introduction. Topiramate is a neuromodulator drug with different action mechanisms that could be implicated in alcohol dependence. It has been studied in open and double-blind studies. Method. In a group of patients (n = 64) undergoing standard treatment for alcohol dependence (according to ICD-10 criteria) with poor outcomes, a 12 month observational, prospective and multicenter study was conducted to assess the usefulness and tolerability of topiramate as addon therapy. Outcome measures were retention rate, alcohol consumption (days of drinking per month and number of Standard Drink Units [SDU] per day, and results of Alcohol Dependence Intensity Scale [ADIS]), craving and priming visual scales and serum transaminase levels. Results. In these patients, adding topiramate leads to a significant decrease (p<0.001) in all the variables studied, including those derived from the craving and priming visual scales, the ADIS as well as the number of drinks/day and SDU/day consumed, the MCV and GGT values. Mean topiramate dose was almost 200 mg/day. Only three patients dropped out due to adverse reactions. Conclusions. Topiramate showed positive results for alcohol dependence in real clinical practice, with a significant decrease in craving-priming and dependence intensity scales, number of drinking days per month reported and transaminase levels. Topiramate seems to be a useful and well-tolerated pharmacological aid for patients with bad evolution in their alcohol dependence treatment

Topiramate as add-on therapy in non-respondent alcohol dependant patients: a 12 month follow-up study.

INTRODUCTION: Topiramate is a neuromodulator drug with different action mechanisms that could be implicated in alcohol dependence. It has been studied in open and double-blind studies. METHOD: In a group of patients (n = 64) undergoing standard treatment for alcohol dependence (according to ICD-10 criteria) with poor outcomes, a 12 month observational, prospective and multicenter study was conducted to assess the usefulness and tolerability of topiramate as addon therapy. Outcome measures were retention rate, alcohol consumption (days of drinking per month and number of Standard Drink Units [SDU] per day, and results of Alcohol Dependence Intensity Scale [ADIS]), craving and priming visual scales and serum transaminase levels. RESULTS: In these patients, adding topiramate leads to a significant decrease (p<0.001) in all the variables studied, including those derived from the craving and priming visual scales, the ADIS as well as the number of drinks/day and SDU/day consumed, the MCV and GGT values. Mean topiramate dose was almost 200 mg/day. Only three patients dropped out due to adverse reactions. CONCLUSIONS: Topiramate showed positive results for alcohol dependence in real clinical practice, with a significant decrease in craving-priming and dependence intensity scales, number of drinking days per month reported and transaminase levels. Topiramate seems to be a useful and well-tolerated pharmacological aid for patients with bad evolution in their alcohol dependence treatment.

Trastornos de personalidad y adicción: relaciones etiológicas y consecuencias terapéuticas / Personality disroders in addicition: etiological relationships and therapeutic consecuences

Existe gran interés por los trastornos de personalidad (TP) en el campo de las adicciones debido a su importancia epidemiológica, papel etiológico e influencia en el pronóstico y tratamiento de la drogodependencia, y por las posibilidades terapéuticas. Numerosos estudios muestran que los TP son comunes entre los adictos, aunque en muchos se solapan conductas derivadas de la propia dependencia con las descriptivas de determinados TP, planteándose si son "artefactos" o "verdaderos". Se han propuesto al menos tres vías causales para la adicción en las que los factores de personalidad son etiológicamente importantes. Plantear ciertos TP como contraindicación para determinadas intervenciones no parece basarse en datos empíricos. Es más, la mejora en la efectividad de los tratamientos de la dependencia pasaría por una mayor atención a los problemas de salud mental, especialmente identificando los TP específicos más predictivos. En el presente artículo se revisan todos estos aspectos. (AU)

La evaluación clínica en adicciones: ¿de qué instrumentos disponemos? / Clinical evaluation in addictions: what instruments do we have?

Dado el importante desarrollo de los servicios de atención a adictos en nuestro país, resulta inaplazable la aplicación sistemática en los servicios de drogodependencias de instrumentos de evaluación clínica, enmarcados en la evaluación de resultados y de la mejora de la calidad asistencial. No obstante, seleccionar en este ámbito un grupo de instrumentos para su utilización clínica y de los que pueda obtenerse información suficiente para la evaluación es difícil: existe un elevado número, y sus objetivos y características son diferentes. Además, es relevante la carencia de un instrumento que aúne el medir por un lado la gravedad de la dependencia, referida a las clasificaciones nosológicas implantadas y, por otro, explore la afectación de las áreas comúnmente alteradas por la adicción, y que se adapte a la realidad del contexto español. En este artículo, se revisan críticamente los instrumentos más utilizados, concluyendo que sería necesaria la elaboración de un instrumento que considere el concepto biaxial de las adicciones y las características de la atención a las drogodependencias en nuestro país (AU)

Influencia de los trastornos psiquiátricos en la efectividad de un programa de mantenimiento prolongado con metadona / Influence of psychiatric disorders in the effectiveness of a long-term methadone maintenance treatment

Objetivo: Conocer los trastornos mentales y del comportamiento en una población de heroinómanos a tratamiento prolongado con metadona y su influencia en los resultados del tratamiento de la dependencia. Metodología: Se siguieron 132 dependientes de opioides en el PMM de la Unidad de Tratamiento de Toxicomanías de Avilés (Asturias) durante seis años de tratamiento. Al comenzarlo y a los seis años se completó un cuestionario ad hoc con variables sociodemográficas y clínicas. Durante el tratamiento se realizó serología VIH y controles de orina (heroína, cocaína y benzodiacepinas). Se les administró la Escala de Ansiedad y Depresión de Goldberg (EADG) y el International Personality Disorder Examination (IPDE).Resultados: La efectividad del programa fue elevada, con mejora sociofamiliar y clínica evidente. Se diagnosticaron un 29,7 por ciento de trastornos afectivos, un 19,1 por ciento de trastornos por ansiedad, un 11,8 por ciento de trastornos psicóticos y un 51,1 por ciento de trastornos de personalidad. Los trastornos ansiosos y afectivos se relacionaban con el consumo de heroína, de BZDs y con ser VIH+, y los de personalidad con ser mayor de 28 años, estar parado, tener causas pendientes y consumir BZDs y cocaína. La dosis de metadona no se relacionó con ningún trastorno psiquiátrico. Conclusiones: Los trastornos psíquicos asociados (depresión, ansiedad, trastornos de personalidad) en los pacientes en el PMM son frecuentes y condicionan una peor evolución, con mayores consumos de drogas y mayor criminalidad. En ciertos pacientes se crea un triángulo VIHdepresión-consumo y necesitarían una intervención psicosocial específica. La mejora en la eficacia del programa pasaría por una mayor atención a los problemas de salud mental (AU)

Consumo de drogas ilegales y alcohol antes y a lo largo de 6 años de mantenimiento con metadona y variables relacionadas / Illegal drug and alcohol use before and during 6 years of methadone maintenance and variables related

Ojetivo: conocer el uso de drogas ilegales y alcohol de una población heroinómana antes y durante seis años de permanencia en tratamiento de mantenimiento con metadona Metodología: se estudiaron 132 dependientes de opiáceos que comenzaron PMM, siendo seguidos durante seis años. Se les realizaron urinoanálisis durante el tratamiento (opiáceos, cocaína, benzodiacepinas) y serología de VHB, VHC y VIH. Se les administró un cuestionario "ad hoc" al comenzar tratamiento y a los seis años, incluyendo consumo de drogas.Resultados: al inicio del tratamiento el 100 por ciento usaba heroína, fundamentalmente i.v., el 34 por ciento cocaína, el 53,1 por ciento benzodiacepinas y el 41,4 por ciento mas de 40 gr./d de alcohol. Durante el tratamiento descendió el consumo de heroína y cocaína, especialmente tras el primer año. A los seis años, ó partes se mantenían abstinentes a heroína y cocaína. Apenas se usaba la vía i. v. La mitad habían consumido BZDs. Sólo el 9,5 por ciento bebía mas de 40 gr/d de alcohol. El abuso pretratamiento de cocaína, los antecedentes penales, el ser VIH+ y el tener un trastorno depresivo, por ansiedad o de personalidad se relacionaron con el uso de drogas o abuso de alcohol durante el tratamiento.Conclusiones: el PMM disminuyó claramente el consumo de heroína y las prácticas de riesgo, además de ayudar a descender el de cocaína y alcohol, sin incidir en el de BZDs., concretándose los resultados a partir del primer año de tratamiento. La infección por el VIH, la codependencia y la comorbilidad psiquiátrica empeoran el pronóstico (AU)