RESUMO
Hoy día la realización de una artroplastia total de rodilla es un procedimiento común. Uno de los mayores desafíos lo constituyen los defectos óseos en la superficie articular de la tibia como resultado de deformidades angulares envaro o valgo. Una opción para enfrentar este problema es la reconstrucción del defecto óseo con la utilización de injerto óseo autógeno. Se realiza en el presente trabajo una revisión de las posibilidades de reconstrucción de ese defecto óseo y se presenta un paciente con diagnóstico de gonartrosis tricompartimental tributario de reemplazo protésico con defecto óseo tibial al que se le realizó la técnica de Windsor y colaboradores (reconstrucción con injerto tomado de los cóndilos femorales distales resecados) con resultado satisfactorio. Esta alternativa garantiza la colocación de una prótesis estable(AU)