RESUMO
En los últimos años, la determinación demarcadores inflamatorios ha cobrado importancia. Los eosinófilos en el esputo inducido son un ejemplo de ello en el caso del asma grave. Objetivo: Valorar la eosinofilia en esputo como marcador de exacerbaciones, control de la enfermedad y decisión terapéutica. Determinar un punto de corte que indique un peor control del asma. Metodología: Estudio descriptivo prospectivo de serie de casos de asma grave eosinofílico, a los que se le realizó una prueba de esputo inducido, cuantificando el porcentaje de eosinófilos.Resultados: Se estudiaron 59 pacientes, con edad media de 51,55 ± 13,5 años. La mayoría con Índice de Masa Corporal (IMC) > 25. Un 65% fueron mujeres. Respecto a la función pulmonar, lo más frecuente fue la obstrucción moderada y el 68,4% algún biológico. La media de eosinófilos en sangre fue 333,62 ± 475 y en el esputo 7,94 ± 11,43%. Se logró establecer un punto de corte del 4% en el nivel de eosinófilos, relacionado con variables clínicas de control de enfermedad (tandas de corticoides y agudizaciones) para definir peor control (p = 0,013 y 0,033). Fue más significativo en tratados con biológicos. Supuso cambios terapéuticos en el 62,3% y al año una mejora en el ACT de 2,65 puntos. Se estableció correlación entre FeNO y eosinófilos en esputo (coef Pearson -0,280; p = 0,033).Conclusiones: El contaje de eosinófilos en el esputo inducido podría ser un marcador de utilidad en la valoración del control del asma grave eosinofílico y en la toma de decisiones.
In recent years, the determination of inflammatory markers has gained importance.Eosinophils in induced sputum are an example of this in severe asthma. Objetive: Assess sputum eosinophilia as a marker of exacerbations, disease control and therapeutic decision. Determine a cut-off point that indicates worse asthma control. Methodology: Prospective descriptive study of a series of cases of severe eosinophilic asthma, who underwent an induced sputum test, quantifying the percentage of eosinophils. Results: 59 patients were studied, with a mean age of 51.55 ± 13.5 years. The majority had a Body Mass Index (BMI) > 25. 65% were women. Regarding lung function, the most frequent was moderate obstruction and 68.4% some biological. The mean number of eosinophils in blood was 333.62 ± 475 and in sputum 7.94 ± 11.43%. It was possible to establish a cut-off point of 4% in the level of eosinophils, related to clinical variables of disease control (courses of corticosteroids and exacerbations) to define worse control (p = 0.013 and 0.033). It was more significant in those treated with biologicals. It involved therapeutic changes in 62.3% and meant an improvement in the ACT of 2.65 points after one year. A correlation was established between FeNO and sputum eosinophils (Pearson coefficient -0.280; p = 0.033). Conclusions: Eosinophil count in induced sputum could be a useful marker in assessing control of severe eosinophilic asthma and in decision making. (AU)
