RESUMO
Este artículo es una reflexión basada en mi ya larga experiencia como supervisora de psicoterapeutas en formación. Comprendo la supervisión como un escenario clínico-formativo y como un proceso generativo y transformador en el cual las personas desarrollan sus competencias. Es a la vez una forma de enseñar un enfoque específico de terapia y una práctica reflexiva sobre la propia práctica terapéutica. Como contexto de aprendizaje y de cambio es isomórfico a la psicoterapia, cuya dinámica relacional emerge en el entrelazamiento de la construcción individual con la co-construcción en el equipo. El objetivo de la supervisión es activar los recursos interaccionales de los terapeutas para que amplíen y complejicen sus posibilidades de relación y sean instrumento de cambio más versátiles y efectivos. El equipo de supervisión siempre opera a través de conversaciones reflexivas con el acompañamiento de un supervisor que es además soporte emocional, consultor, colega, docente y promotor de una sinergia que hace de la supervisión una fascinante experiencia vital para consultantes, terapeuta y supervisor.
This article is a reflection based on my prolonged experience as supervisor in psychotherapist training programs. I understand the supervision as a clinical-formative scenario and as a generative and transformative process. It is also a way to teach a specific therapy model and a reflexive practice on the own therapeutic practice. There is an isomorphism between therapy and supervision and in both contexts the relational dynamics emerges in the interaction between the individual construction with the co-construction in the supervision team. The supervision purpose is to activate the therapists's relational. Resources in order to extend and diversify their relational competences, so they can become more effective and versatile instruments of change. The supervision team operates thought reflexive conversations with de supervisor, who is also emotional support, consultant, trainer, colleague and advocate. This way the supervision context creates a synergy where clients, therapists and supervisors have a fascinating existential experience.
RESUMO
Este artículo analiza someramente la forma como tres modelos contemporáneos de terapia sistémica explican el rol del terapeuta en el cambio que se activa en el proceso de ayuda. Se toman como referentes principales la relación de poder inherente a la terapia, el saber del terapeuta y su estilo directivo o simétrico con respecto a los consultantes. Se propone la opción de que el terapeuta asuma una postura de "paramodernidad" para trascender los dilemas que le plantea su función y admita que sus preferencias teóricas deben guiarse por el imperativo ético de generar un contexto donde los consultantes logren ampliar su margen de libertad, limitado por los síntomas y los conflictos interpersonales que constituyen los motivos de consulta.
This article briefly analyzes, how three contempory family therapy models explain role of the therapist in the process of change in therapy. The principal referents of analysis, the power relationship inherent to therapy, the therapists knowledge, and his/her directive or symmetric with regards respect to the consultants. It proposes that the therapist could assume a paramodern stance to go beyond the dilemmas of his/her social function and accept that his/her theoretical preferences must be founded on an ethical imperative to generate a context, where the consultants expandtheir margin of freedom, which is limited by the symptoms and the interpersonal conflicts presented as complaints.