RESUMO
La sepsis constituye aún un desafío para el pediatra. El éxito de su tratamiento requiere del reconocimiento precoz de la infección, de una terapia antimicrobiana apropiada y de un soporte respiratorio, quirúrgico y cardiovascular agresivo. Se presenta un lactante de dos meses de edad, blanco, masculino, con antecedentes de haber recibido la inmunización correspondiente según el esquema de vacunación; dos días después comienza con vómitos, hace crisis de cianosis, hipotonía, llanto débil y es llevado con urgencia al cuerpo de guardia de pediatría donde llega casi fallecido, se encontraba con severos trastornos hemodinámicos sin respuesta a estímulos dolorosos y mirada fija. Al ingreso se intenta realizar abordaje venoso profundo a través del eje femoral izquierdo, pero resultó fallido, le provocó secundariamente un espasmo arterial sin sangramiento activo por la puntura, temperatura y movilidad espontánea normales. Se realizó tratamiento con pentoxifilina intravenosa, se obtuvo un resultado exitoso en la pierna afectada y mejoría de otras funciones que se encontraban en fallo.