The effects of long term use of inhaled corticosteroids on linear growth, adrenal function and bone mineral density in children

ABSTRACT

In this study we aimed to investigate the long term effects of inhaled steroids on linear growth, adranal function and bone mineral density. Thirty children with moderate asthma were randomly divided into two groups.Fifteen children (8 boys, 7 girls mean age; 10.6 ± 2.1) were treated with budesonide (group 1), and 15 (9 boys, 6 girls, mean age; 9.6 ± 2.4). with fluticasone propionate (group 2). Control group included 30 children. Anthropometric assesment, symptom and medication scores, pulmonary functions, bone mineral density, serum and urine cortisol levels and ACTH stimulation test were evaluated at the beginning of the study and after one year period. Symptom and medication scores, pulmonary functions improved significantly in both groups (p < 0.05). The mean annual growth was similar in group 1 and 2 and control group. Bone mineral density was comperable with control group at the beginning of the study and after one year. Mean serum cortisol level diminished at the end of the therapy but no significant differences were found between the initial and end values in respect to urine cortisol levels and cortisole/creatinin ratio. Of three groups ACTH stimulation test revealed that there were no significant difference between stdy and control groups. In conclusion, although we did not observed any side effects of inhaled corticosteroids we suggest that children treated with inhaled corticosteroids for a long time should be followed closely with respect to side effects

RESUMEN

El presente estudio tuvo como objetivo investigar los efectos a largo plazo de los esteroides inhalados sobre el crecimiento lineal, la función adrenal y la densidad mineral ósea. Treinta niños con asma moderada se distribuyeron aleatoriamente en dos grupos 15 de ellos (8 niños y 7 niñas, con una media de edad de 10,6 ± 2,1 años) se trataron con budesonida (grupo 1), y los otros 15 (9 niños y 6 niñas, con una media de edad de 9,6 ± 2,4 años) con propionato de fluticasona (grupo 2). El grupo de control constaba de 30 niños. Se realizó una exploración antropométrica, una puntuación de los síntomas y la medicación, análisis de la función pulmonar, de la densidad mineral ósea y del nivel de cortisol en sangre y orina, así como pruebas de estimulación de ACTH, tanto al principio del estudio como tras un período de un año. La puntuación de los síntomas y la medicación y la función pulmonar mejoraron significativamente en ambos grupos (p < 0,05). El crecimiento medio anual fue similar en los grupos 1, 2 y el de control. La densidad mineral ósea fue comparable con la del grupo de control en el inicio del estudio y al cabo de un año. El nivel medio de cortisol en sangre descendió al final de tratamiento, pero no se observaron diferencias significativas entre los valores iniciales y finales con respecto al nivel de cortisol en la orina y la proporción entre cortisol y creatinina. La prueba de estimulación de ACTH no reveló diferencias significativas entre los grupos de estudio y el de control. En conclusión, aunque no observamos ningún efecto secundario de los corticosteroides inhalados, sugerimos el control meticuloso de los posibles efectos secundarios en los niños tratados con estos fármacos de forma prolongada