Trastornos menores. Los límites de la psiquiatría / Minor disorders. The limits of psychiatry

RESUMEN

Los trastornos menores incluyen un amplio abanico de cuadros clínicos de límites muy imprecisos y arbitrariamente establecidos, por lo que su estudio conlleva importantes dificultades metodológicas. Los datos de prevalencia de trastornos menores, especialmente ansioso-depresivo, resultan muy elevados cuando se utilizan escales de síntomas como instrumentos de cribaje. Se cuestiona en este texto la validez de muchos de estos instrumentos. Existe una arraigada corriente de opinión en nuestra sociedad, que se refleja en los medios de comunicación y a través de los líderes de opinión, que favorece el aumento de la demanda asistencial en salud mental a través de la sensibilización de la población hacia la petición de atención profesional en situaciones de dificultad y sufrimiento personal. Debemos ser capaces de diferenciar, mediante una detallada exploración psicopatológica, los trastornos menores en los que el abordaje psiquiátrico puede prevenir evoluciones desfavorables, incluso la evolución a trastornos psiquiátricos severos, de las dificultades de la vida cotidiana, evitando en lo posible la medicalización del sufrimiento y la infelicidad. Dicha medicalización no parece mejorar la salud de la población y puede, por el contrario, contribuir a desviar recursos sanitarios, necesarios para la asistencia de los trastornos psiquiátricos severos

ABSTRACT

Since minor disorders include a broad spectrum of clinical manifestations where boundaries are arbitrary and blurred, studying them presents major methodological difficulties. Very high rates of prevalence are reported for minor disorders, in particular anxiety-depressive ones, whe symptom-rated scales are used as tools for screening. The validity of such scales in detecting psychiatric disorders in under questions. There is at present a tendency in our society, reflected in the media through the opinions of leaders in the field, to seek the help of mental health professionals in cases of personal difficulty and suffering of the everyday kind. Through detailed psychopathological examination we must be able to differentiate minor disorders on one hand, which indeed can be prevented from evolving into severe disorders, through psychiatric treatment, from simply everyday troubles on the other hand, the idea being to avoid the medicating of ordinary-suffering and unhappiness. Such medication does nothing to improve the general health of the population, and resources necessary for the treatment of true, major psychiatric disorders are diverted