ABSTRACT
En la sepsis severa, la interacción normal entre el endotelio y las células sanguíneas se encuentra dramáticamente afectada y puede resultar en un estado procoagulante. La púrpura fulminante se caracteriza por la presentación aguda de hemorragia cutánea progresiva con necrosis y CID. Se ilustra el caso de un lactante mayor masculino, quien ingresa con lesiones purpúricas que se externdieron con rapidez, acompañadas de irritabilidad y signos de hipoperfusión tisular. Dada la presencia de sepsis severa, y sindrome de disfunsión de órganos, con serología para mycoplasma pneumoniae, se plantea el diagnóstico de púrpura fulminante, iniciandose las siguientes medidas farmacológicas: antibioticoterapia de amplio espectro, inmunoglobulina, glutamina, pentoxifilina, hemoderivados, nutrición enteral precoz, y proteína C activada recombinante humana, apreciándose mejoría de signos clínicos y paraclínicos. La detección temprana de los signos de alarma por el pediatra, garantizó el inicio precoz del tratamiento, mejorando el pronóstico de este paciente