RESUMO
Los frijoles constituyen un alimento básico en la dieta del costarricense. Sin embargo, la cantidad y frecuencia con que se consumen ha venido disminuyendo, sobretodo en la zona urbana. Esta tendencia resulta preocupante, ya que el frijol es fuente de proteínas, hierro vegetal, fibra ácido fólico, tiamina, potasio, magnesio, y zinc (USDA, 2000). Su aporte a la dieta del costarricense, a pesar de la disminución en su consumo, es importante por su contenido de nutrientes y de fitoquímicos los cuales son de utilidad en la prevención y tratamiento de varias de las patologías que afectan a la población costarricense. La presente revisión, documenta los efectos positivos que algunos nutrientes y otros elementos que aporta el frijol tienen en la prevención y el control de algunas de las enfermedades crónicas que constituyen problemas de salud pública en el país. Se abordan de manera particular la fibra, el ácido fólico y el magnesio. Asimismo, se hace referencia a otras sustancias fitoquímicas, presentes en los frijoles, que constituyen elementos protectores de la salud y que hacen de los frijoles un "alimento funcional". Finalmente, se ofrecen recomendaciones prácticas orientadas a mejorar la digestibilidad de este alimento, de manera que se contribuya a mantener e incrementar su consumo a nivel de los hogares costarricenses. Descriptores: frijoles (phaseus vulgaris), valor nutritivo, dieta, enfermedad crónica, digestibilidad.